La temporada alta del turismo arranca con un 74% de ocupación en Cullera
Los hoteles y apartamentos cubren plazas progresivamente mientras algunos de ellos ya tienen completa su agenda para los fines de semana de julio y agosto
Los restaurantes ya registran llenos
Las terrazas de los restaurantes ya registraron llenos absolutos el pasado fin de semana. / Joan Gimeno
El cambio de hoja en el calendario permite el inicio de las vacaciones de muchas familias. Con la llegada de julio, Cullera se llena de vida. Y este verano, la localidad costera puede alcanzar unos niveles de ocupación turística que superen a los del año pasado. Así lo indican, al menos, las primeras previsiones realizadas por el sector turístico. De momento, el séptimo mes del año arranca con un 74% de las plazas hoteleras ya asignadas.
Un punto de partida esperanzador, ya que, tradicionalmente, los periodos de mayor actividad turística se sitúan entre la segunda quincena de julio y la primera de agosto. Los responsables hoteleros consultados por Levante-EMV destacan que sus reservas ya alcanzan el 74%, mientras que entre los apartamentos se sitúa en el 68%. Sin embargo, algunas de las agendas están ya completas para buena parte de los fines de semana del verano.
Con el paso de los días, resulta cada vez más complicado encontrar alojamiento, ya que en muchos casos las reservas se realizan con la suficiente antelación. Especialmente, a finales de julio y principios de agosto, periodo en el que la ocupación será total.
Un anticipo
Las sensaciones son también positivas entre los restauradores de Cullera, que destacan el buen funcionamiento del sector ya durante los fines de semana de junio, lo que invita al optimismo. También han sido especialmente buenos los periodos de Fallas y Semana Santa.
De hecho, son muchos los bares y restaurantes que ya ofrecían una muy buena imagen durante el pasado fin de semana, en el que dio comienzo la operación salida. Esta tendencia se apreciaba todavía más en aquellos establecimientos situados en primera línea del mar. Los responsables del sector destacan, igualmente, «el importante papel que está jugando la promoción turística de la gastronomía de kilómetro cero, ya que cada vez son más las personas que cuando se acercan a los restaurantes muestran un especial interés por los platos elaborados con productos de este tipo, muy comunes ya en las cartas».
Cullera reciben numerosos visitantes con la llegada del verano. / Joan Gimeno
Impacto de los festivales
A las buenas previsiones que se realizan desde los diversos negocios dedicados al sector turístico, hay que añadir el impacto que supone para la ciudad la celebración de dos de los festivales musicales más importantes del verano. Por un lado, el Zevra, que se desarrollará entre el 22 y el 25 de julio, y, por otro, el Medusa, que tendrá lugar entre el 7 y el 12 de agosto.
Ambos eventos esperan congregar centenares de miles de espectadores, que se sumarán a la ya de por sí elevada ocupación de hoteles y apartamentos. Es, precisamente, en estos periodos cuando Cullera destacará por encima del resto de ciudades turísticas autonómicas y nacionales, al convertirse en uno de los principales polos de atracción de visitantes.
La localidad de la Ribera Baixa dispone de todos los ingredientes para cocinar un verano de récord.
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