Carlet implanta la lucha biológica para controlar plagas urbanas
La suelta de un pequeño escarabajo que se alimenta del «cotonet», presente en el arbolado de la ciudad, evita el uso de insecticidas
Es un tratamiento natural que previene futuras plagas y no afecta ni a personas ni animales
Técnico de Paimed realizando el control de plagas. / Levante EMV
Josep Cortes
El Ayuntamiento de Carlet ha desarrollado un sistema de gestión de plagas en sus zonas verdes con técnicas más seguras para el medio ambiente y para sus habitantes. Esta vez han colocado el foco en reducir el uso de plaguicidas. Conscientes del impacto negativo que los productos químicos pueden tener en la salud pública y en los ecosistemas locales, el consistorio ha decidido desarrollar métodos alternativos y sostenibles, como el uso de control biológico y técnicas de manejo integrado de plagas (MIP).
Estas estrategias no solo buscan minimizar el uso de sustancias tóxicas, sino también «fomentar la biodiversidad y preservar la fauna beneficiosa, contribuyendo así a la creación de espacios urbanos más saludables y equilibrados», según la empresa adjudicataria del servicio.
Las sueltas realizadas en Carlet han sido ejecutadas por empleados de la compañía Paisajistas del Mediterráneo (Paimed). En cuanto al insecto utilizado para controlar la plaga es el Cryptolaemus montruozieri, un pequeño escarabajo que se alimenta del «cotonet» o Psila del Ficus. El principal objetivo es disminuir la población del «cotonet» en los ejemplares de ficus que existen en los jardines urbanos, evitando el uso de insecticidas que pueden llegar a ser perjudiciales para la sociedad.
Sin tratamientos químicos
Entre los principales beneficios de la lucha biológica destacan que los depredadores naturales están presentes en todo el periodo vegetativo de la planta, además se evitan problemas de resistencia de huevos y larvas y, por consiguiente, la reproducción del insecto causante de la plaga. Al ser naturales se eliminan los tratamientos químicos y como resultado se minimizan las alergias y reacciones de la fauna y de la población.
La estrategia llevada a cabo por los profesionales, que se realizó a partir del lunes 24 de junio y ya ha sido finalizada, ha consistido en soltar directamente los insectos en los árboles afectados, además de verificar que en los árboles contiguos a los afectados no había huevos ni estaban contagiados. La empresa asegura que «esta suelta no tiene ningún efecto negativo ni en personas ni en mascotas».
Fauna útil
Con este objetivo se ha otorgado prioridad a la lucha biológica frente a la lucha con otro tipo de productos, como los fitosanitarios, aumentando de esta manera la biodiversidad de la fauna útil autóctona, y además el control de la fauna nociva en especies vegetales.
La lucha biológica es una estrategia de control de plagas caracterizada por utilizarse en las poblaciones de sus enemigos naturales para reducir la cantidad de individuos de una especie que causa una plaga. Esta estrategia se realiza mediante la suelta de insectos depredadores de la plaga que está afectando a las plantas.
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