La lluvia complica la búsqueda de la desaparecida de Sollana

Las lluvias del pasado fin de semana y del lunes dificultan las labores de búsqueda de Paquita Estarelles, la mujer de Sollana de 79 años desaparecida hace doce días en una zona rural entre Alborache y Turís. De hecho, la unidad canina del cuerpo de Protección Civil de Castellón que tenía prevista una nueva batida hoy martes no regresará al lugar hasta el jueves. También podría retrasarse, según se comporte la climatología, el despliegue de los mejores perros de rescate de la Guardia Civil.

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La aparición de precipitaciones en los últimos días supone un impedimento para el rastreo de Paquita, ya que se dispersa el olor. Cualquier pista que puedan seguir las unidades caninas se difumina en el aire. Un hecho que frustra las esperanzas de la familia de encontrarla. "Preferíamos que no lloviera, pero como eso se escapa de todo control, mejor que vengan más tarde", comenta uno de los parientes la desaparecida, consciente de que los perros necesitan el mejor escenario posible para incrementar la probabilidad de éxito.

Falsa alarma

El dispositivo de búsqueda sigue activo, aunque la lluvia no permite realizar los rastreos debidamente. En las últimas horas, se han pegado nuevos carteles en los alrededores al punto de desaparición y en los núcleos poblacionales cercanos para mantener alerta a los vecinos y agricultores de la zona.

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Asimismo, el lunes se produjo una falsa alarma tras detectarse un saco que flotaba en el río. De él sobresalía lo que parecía, desde la lejanía, un pie humano. Sin embargo, tras alertar a los responsables de la Guardia Civil, se comprobó que en el interior se encontraban restos caninos.