Una experta en sonrisas que espera esbozar la suya en la Fonteta

Rosa Gallego Ortiz. Falla Pintor Stolz-Burgos. 28 años.

Rosa Maria Gallego Ortiz.

Rosa Maria Gallego Ortiz. / M. Domínguez

Moisés Domínguez

Moisés Domínguez

«¿Y por qué no vamos a celebrar 60 años? Y organizamos un homenaje al último fundador, que es abuelo de uno de los presidentes actuales, Pablo Huerta, para darle las gracias de que, por tener la idea de crear una falla, todos estamos donde estamos». Y por eso, Rosa Gallego ha sido la fallera mayor del 60 aniversario de Pintor Stolz-Burgos. Y con ella, la comisión buscará un puesto de honor que se les ha resistido en los últimos 25 años.

La "deontóloga" que dio el paso adelante

Lo harán con alguien acostumbrada ya a que su vida dé un giros inesperados. «Hice bachillerato de letras y primer curso de Economía porque creía que me gustaba. Un día, mi tía, que es odontóloga, me preguntó que por qué me veía tan despagada». Estaba en crisis existencial. «Le dije que lo que estaba haciendo no era lo mío. Ella me recordó que de pequeña quería ser «deontóloga» y me dijo que por qué no iba a verla». Le fue tan bien que «hice el doble grado de Higiene y Prótesis Dental a la vez, descubrí el mundo friki del diente y cuando estaba acabando, me metí en la carrera de Odontología, me gradué en la UV. Y ahora, a trabajar». De momento, con su tía, «Amparo Gallego». Los especialistas en la materia suelen acudir a diferentes clínicas. «De momento quise hacerlo sin sobrecargarme, entrar en contacto y compaginarlo de forma tranquila con ser fallera mayor». 

Ahora mismo, ya con estudios, trabajo y un piso «sobre plano» en proyecto, sólo le falta rematar con la vertiente fallera. «Somos de Pintor Stolz como muchas otras personas, que llegan a la falla por amistades. Eso le pasó a mis padres. Yo ya fui fallera mayor infantil». Sin salir en la preselección. «Era muy pequeñita y la verdad es que no estaba preparada para salir». 

Rosa, rodeada por sus tres presidentes, Ivan, Carlos y Pablo, en la cremà

Rosa, rodeada por sus tres presidentes, Ivan, Carlos y Pablo, en la cremà / Falla Pintor Stolz

Rosa Maria Gallego aguardando en la preseleccion

Rosa Maria Gallego aguardando en la preseleccion / M. Domínguez

Entre Rosas y Raúles

Es hija de Rosa y Raúl. «Mi nombre lo decidió mi padre y dijo que Rosa. Y mi madre decidió el de mi hermano, y dijo que Raúl. Como puedes ver, muy originales no hemos sido» dice, divertida. Y acompaña sus cuestiones bucodentales con las cuestiones falleras. «Durante la pandemia me dio por leer blogs de indumentaria y me atreví a hacerme patrones y corpiños, para lo que usé una colcha. Este año de fallera mayor me he confeccionado dos faldas. Y me siento muy orgullosa porque he sido autodidacta. La pandemia me trajo algo bueno».

Un agosto triste

Por cierto, su especialidad es «odontología general y estética, que es lo que más me gusta y a lo que me gustaría dedicarme exclusivamente: a crear las mejores sonrisas». Si el jurado, le dibuja a ella una sonrisa a finales de septiembre, no será por un tratamiento odontológico, sino por el resultado de un veredicto. 

(Tras la entrevista, nada más empezar el mes de agosto, apenas tres días después de la Batalla de Flores, Rosa perdió a su abuela paterna, Ascensión. Una razón más para dedicar lo que pueda pasar)