Pilar Bernabé: «La inversión en depuración y desalación superará los 600 millones de euros»

Pilar Bernabé, delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, fue la encargada de realizar el cierre institucional del I Foro del Agua organizado por Levante-EMV, con la colaboración de Facsa. Bernabé definió la situación del agua como uno de los actuales «problemas de nuestra civilización» y que «responde a la realidad en la que vivimos».

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Bernabé recordó que «la escasez de agua afecta a un gran número de la población mundial» y se refirió a este recurso como «un bien finito por el cual hay que trabajar a largo plazo, porque es de todos y no se puede hacer un uso indiscriminado de él».

La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana reconoció que estamos en un momento de sequía extrema en el que se han tenido que establecer medidas concretas. «Las dos cuencas principales de la Comunitat Valenciana están a unos niveles muy por debajo de la media nacional. Debemos ser conscientes de la realidad de este recurso. Esto requiere una visión de futuro y una amplitud de miras».

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Asimismo, hizo referencia al negacionismo del cambio climático, que «no es algo nuevo y ya lo escuchábamos hace veinte años, cuando se pusieron en marcha iniciativas valientes en materia del agua para garantizar su abastecimiento en todo el territorio». En aquel momento, según Bernabé, «se apostó por algo que podía parecer nocivo, como la desalación, y que, hoy, permite que la Comunitat Valenciana pase de ser un territorio demandante de agua para muchas cosas a ser incluso una zona exportadora y cedente de agua, como vimos hace apenas dos meses».

Inversión estatal

Asimismo, Pilar Bernabé abogó por dejar a un lado los momentos de contemplación y pasar a la acción. «La acción es inversión y hay que verla reflejada cada día». En este sentido, aseveró que «el Gobierno de España apuesta claramente por políticas valientes que garanticen el agua para los próximos veinte años».

En un primer punto, explicó que el Gobierno de España ha destinado más de 120 millones de euros en las mejores de las infraestructuras de las cuencas de la Comunitat Valenciana —en los embalses, las cuencas, la renaturalización, las infraestructuras, la conectividad y la conexión—, a través de las confederaciones hidrográficas del Júcar y del Segura, «para que sean más eficientes, reutilicen más agua y garanticen que no se desperdicie tanto volumen de agua».

Otro eje de inversión se destina a la agricultura valenciana, donde el ejecutivo ha invertido 342 millones de euros en la mejora y la modernización de las infraestructuras agrarias en la Comunitat Valenciana. «Hoy, las comunidades de regantes pueden ver cómo han mejorado su capacidad de regadíos gracias a esa inversión millonaria por la que seguimos apostando y vamos a seguir apostando —y añadió—. Tenemos muchos proyectos en marcha que van a mejorar esa capacidad y conectividad del agua a nuestros regantes, especialmente en la cuenca del Júcar».

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Depuración y desalación

Por otro lado, se refirió a la clara apuesta del ejecutivo, a través de los Pertes, por la digitalización y la modernización de los ciclos integrales del agua. «El Gobierno de España ha apostado por la reutilización, la depuración y, sobre todo, por la desalación como piezas fundamentales para esa mirada de futuro durante los próximos 20 años en la gestión y en la política del agua».

En este punto, Bernabé destacó que, actualmente, hay cuatro proyectos en las grandes ciudades valencianas que aspiran a acceder al Perte del Agua y que supondrían una inversión cercana a los 40 millones de euros en la Comunitat Valenciana.

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«La inversión de futuro del Gobierno de España en la Comunitat Valenciana durante los próximos años superará los 600 millones de euros en depuración, reutilización y desalación». En este sentido, puso como ejemplo la inversión que ha puesto en marcha el Gobierno central en la ampliación de la desaladora de Torrevieja, que supone un crecimiento de casi el doble de su capacidad y que, además, «demuestra una apuesta clara por las energías renovables que contribuya, a su vez, a abaratar el coste del agua». «Se trata de un compromiso que el Gobierno de España adquiere con los regantes y los consumidores —explicó Bernabé—. Es una apuesta clara por las energías renovables y sostenibles para garantizar esa depuración y desalación del agua».

Por otro lado, Bernabé hizo referencia a que «el cambio de concepto en el consumo y el uso del agua es cosa de todos, no solo de las administraciones»; en este sentido, la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana tendió la mano a las empresas, «que tienen la capacidad de liderar esa transformación».

Por último, la delegada del Gobierno cerró su intervención alegando que «gracias a los fondos del plan de recuperación y resiliencia contamos con las mejores oportunidades para transformar los sistemas del agua en la Comunitat». De este modo, según Bernabé, «garantizaremos la sostenibilidad de nuestro planeta, pero, sobre todo, la de nuestra economía y la del bienestar de las personas. No tenemos un planeta B, necesitamos cuidar y mantener el que tenemos», finalizó.