Carlos III y la venganza de Diana de Gales casi 30 años después de su muerte

Están a punto de cumplirse 27 años del trágico fallecimiento de Lady Di, princesa de Gales, en un accidente de tráfico ocurrido en París. Pero, pese al tiempo transcurrido, especialistas en la casa real británica, como Pilar Eyre, coinciden en que el que fuera su marido y hoy es el rey Carlos III sigue sintiendo sobre él el yugo que experimentó cuando era heredero al trono.

De hecho, hay quien dice que la 'venganza' de Diana de Gales sigue materializándose y cada vez es más fuerte, a tenor de los últimos acontecimientos registrados en Londres durante el tradicional desfile del Trooping the Colour, que festeja de manera simbólica el cumpleaños del monarca. Y es que parece que una maldición persiga a Carlos III sin que él pueda hacer nada por escapar de ella.

Kate Middleton reaparece a los 6 meses

El desfile del Trooping the Colour supuso la reaparición oficial de Kate Middleton después de que ésta anunciase que estaba tratándose de un cáncer y que necesitaba quimioterapia. La princesa de Gales había excusado su presencia apenas unos días antes debido a su estado pero luego, finalmente, acabó acudiendo junto a su esposo y sus tres hijos.

Al parecer, según relata Pilar Eyre en 'Lecturas', Kate Middleton participó en el acto porque así lo exigió su suegro, Carlos III, a quienes sus asesores habían advertido que tal vez él y la reina no fueran suficientes para despertar el interés del público dado que los últimos actos en los que habían participado tan solo habían generado un interés moderado. Así las cosas, lo mejor parecía que toda la familia real estuviese presente en el desfile para seguir cimentando la popularidad en la que reposa la casa real británica.

Kate Middleton reaparece sonriente en público en el desfile militar anual de Londres 'Trooping the Colour'

Por eso, Carlos III pidió a su hijo que Kate acudiera también al Trooping the Colour, aunque el príncipe Guillermo le puso una condición: ella publicaría un comunicado 24 horas antes para hacer saber que su aparición no se debía a que estuviera curada, sino que era algo excepcional.

"Hay días buenos y días malos con la quimioterapia -decía la princesa de Gales en la nota-. Aún estoy bajo tratamiento y continuaré así hasta que mejore" porque "no estoy fuera de peligro", quiso dejar claro.

Y Kate llegó al desfile deslumbrante y acaparó todas las miradas, todos los vítores, todo el interés, tanto del público como de los medios de comunicación, hasta el punto de que eclipsó por completo al rey Carlos III y a la reina, su esposa Camila.

No era la primera vez que el monarca vivía esta situación. Durante su matrimonio con Lady Di era testigo cada día de la irresistible atracción que su mujer ejercía sobre todo el mundo mientras él, siendo el heredero al trono, pasaba a un discretísimo segundo plano.

En el desfile ocurrió lo mismo y, aún más, se maximizó porque al lado de Kate y Guillermo, a Carlos y Camila se les veía en balcón de Buckingham Palace "todavía más mayores y cansados", subraya Pilar Eyre, mientras que la multitud coreaba sólo el nombre de Kate.

Y, ahora, casi 40 años después y 27 años de ocurrida la muerte de Lady Di, Carlos III volvió a verse en la misma situación que con su primera esposa porque, "para bien o para mal -insiste Eyre- siempre ha habido una mujer eclipsándolo: su madre, la reina Isabel II, su esposa, Diana de Gales y, ahora, su nuera, Kate Middleton". Como dice ella: "Triste sino" el del rey británico.