Retiran más de un kilómetro de hidrocarburo de la orilla de las playas

El operativo de limpieza de Tragsa y las tres brigadas de refuerzo de Parques Naturales han retirado ya del litoral sur más de 1 kilómetro de hidrocarburos. Los trabajos se despliegan a dos niveles, uno más superficial para limpiar la línea de fuel de 2 kilómetros de largo por dos metros de ancho, y otro con catas en el subsuelo para determinar la profundidad del fuel depositado en los arenales. 

Paralelamente se están haciendo analíticas para comprobar la calidad del agua y evaluar su toxicidad. Está previsto que mañana se abra el espacio público de l’Arbre del Gos, el Saler y la Garrofera, pero el ayuntamiento desconoce cuándo podrá descolgar las banderas rojas y permitir el baño. Esperan poder hacerlo el fin de semana, dada la afluencia en plena temporada alta. 

Por lo demás, los medios aéreos y marítimos de Salvamento comprobaron ayer y han vuelto a constatar hoy que no existe contaminación en el mar, ni en el perímetro de la zona en la que se detecta el vertido, a 800 metros de la playa, ni en otras áreas dispersos más allá de pequeñas manchas flotantes sin excesiva importancia. 

Según ha explicado sobre el terreno la delegada de Gobierno, Pilar Bernabé, la ampliación del espigón de la Gola de Pujol en 75 metros ha actuado como dique de contención permitiendo en buena medida frenar el avance del vertido, con lo que ha celebrado el trabajo incluido en las obras de regeneración de las playas del sur. 

En cuanto al Plan Marítimo Nacional en nivel 1 activado durante la jornada de ayer, utilizado en episodios de gravedad media, Bernabé ha dicho que la intención es rebajar la intensidad al nivel 0 en las próximas horas. Poco a poco desescala una emergencia que afortunadamente nunca llegó a la categoría de crisis.