Las obras afloran en el Botànic entre vecinos y turistas

Los residentes del barrio de Extramurs de València conviven con el ‘boom’ de trabajos que hay en más de una decena de edificios de la zona

En apenas cinco calles pueden contarse 11 contenedores, que reducen espacio para aparcar, además de andamios, WC móviles y grúas

Uno, dos, tres, cuatro… y así hasta 11. Esos son los contenedores de obras que se pueden contar en el barrio del Botànic, en el centro de València y perteneciente al districto de Extramurs. En un paseo de apenas 15 minutos por poco más de cinco calles, faltan dedos de las manos para hacer un recuento de las obras que hay en marcha.

Hay edificios que se rehabilitan por completo; un megahotel levantándose de cero; pisos en obras; bajos renovándose; viviendas convertidas en ‘duplex’ de lujo de casi 500.000 euros; y también trabajos en el Mercado de Rojas Clemente.

Muchas de estos proyectos responden al ‘boom’ turístico que sufre el barrio, repleto de apartamentos que se ofertan en las plataformas, y también con varios edificios dedicados, en exclusiva, a alquileres vacacionales por días, además de futuros hoteles anunciados. No obstante, también se promocionan algunos nuevos bloques de viviendas.

Menos sitio para aparcar

Las obras y sus molestias son comprensibles además de, a priori, una cuestión temporal. El problema es cuando coinciden en el tiempo y en un barrio como el de Botànic, de muy pocas calles y encorsetado entre dos grandes avenidas: la Gran Vía Fernando el Católico y Guillem de Castro que han visto, además, un aumento de tráfico los últimos meses.

Con sus contenedores, en las obras se suman las grúas de diferente tipo, los andamios y demás estructuras metálicas que precisan los obreros para realizar su trabajo. También se ven por las calles vallas y placas móviles, que limitan el sitio de los residentes para aparcar, ya que se juntan con los contenedores de residuos (que en algunos puntos son hasta seis, al incluir el reciclaje).

Las calles con obras son Borrull, Botànic, Túria, Lepanto, doctor Montserrat y San Pedro Pascual, además de la plaza Rojas Clemente; y, recientemente, ni el Jardín Botánico que da nombre al barrio se libró, pues también se levantó parte del asfalto de esa calle.

Pero las obras no se quedan solo ahí, la Petxina, el barrio vecino al otro lado de la Gran Vía, ha sufrido estos meses el derrumbe de grandes edificios y ahora ve cómo han empezado a reasfaltarse algunas de sus calles.