Catalá reclama financiación para las Ciudades Verdes que luchan "contra el cambio climático"

La alcaldesa recuerda la voz de la ciudadanía contra la conversión del cauce del Turia en autopista como primer hito de la conciencia verde de València

La alcaldesa, con el con el director general de Medio ambiente de la Comisión Europea, Patrick Child

La alcaldesa, con el con el director general de Medio ambiente de la Comisión Europea, Patrick Child / Loyola Pérez de Villegas

José Miguel Vigara

José Miguel Vigara

La alcaldesa de València, María José Catalá, ha apelado al compromiso de todas las instituciones para ayudar a ciudades como la suya, que forman las ciudades Mission para avanzar en las acciones, normalmente pioneras, que contribuyen al conseguir la sostenibilidad urbana y, por consiguiente "combatir el cambio climático". Lo ha hecho como declaración d eintenciones en la inauguración de la Semana de las Ciudades por el Clima, el acto central de la Capitalidad Verde Europea. 

Catalá ha asumido la existencia del Cambio Climático, por lo que estas jornadas "inéditas, porque estos foros salen por primera vez de Bruselas, y reunirán a ochocientas personas para bordar la búsqueda de soluciones para combatir el cambio climático. Va a ser el faro que iluminará Europa para conseguir ciudades inteligentes". 

Catalá ha atribuido a la ciudad un punto de arranque en su sostenibilidad, que "está en el ADN de los valencianos". En concreto, que "hace más de 60 años, y después de una trágica riada, se desvió el cauce del Turia. Entonces, se quiso convertir en una autopista, pero los valencianos levantaron la voz y en lugar de eso se convirtió en un maravillos jardín. Esa es la primera piedra de ser Capital Verde, que además es la primera del Mediterráneo que alcanza esa distinción. Ahora queremos ser ambiciosos, como lo fuimos en el pasado, preparándonos contra el cambio climático. Queremos alcanza la neutralidad climática y vamos a empeñar el esfuerzo de forma transversal". 

Para ello ha enumerado tres acciones a desarrollar en los próximos años: "la generación de más zonas verdes, más de 350.000 metros cuadrados con proyectos como el Parque de Desembocadura que culminará el Jardín del Turia, y que se llamará Tramo Europa, para recordar nuestro pacto".

El segundo es "una apuesta decidida por la movilidad sostenible, siendo líderes en el transporte público, y con una inversión de 172 millones y para que, antes de 2030, el 94 por ciento nuestros autobuss serán híbridos o eléctricos". 

Y por último, "un cambio en el paradigma eléctrico, con la mayor planta solar pública urbana de Europa, instalando más de 6.600 de placas solares en los cementerios municipales con lo que ahorraremos la emisión de cerca de 1.000 toneladas de CO2 al año. ¿Qué haremos con esa energía? Pues bien, no solo abasteceremos las instalaciones municipales, sino que siguiendo con los objetivos de las ciudades misión y para hacer una transición justa y social…..vamos a usar esa energía generada para ayudar a 800 hogares vulnerables. Porque no podemos avanzar en la transición energética y en la sostenibilidad, si no tenemos en cuenta a quienes menos tienen. Esa es una reflexión que me gustaría dejar aquí: las ciudades deben avanzar hacia la neutralidad climática, pero deben hacerlo de la mano de sus vecinos, teniendo en cuenta sus condiciones; de lo contrario tenemos el elevado riesgo de que todos los pactos que lleguemos las ciudades se queden en un mero eslogan, porque si nuestros vecinos no se sienten acompañados y escuchados en este tránsito, no llegaremos nunca a buen puerto".

Las jornadas han empezado en el Palau de la Música

Las jornadas han empezado en el Palau de la Música / Loyola Pérez de Villegas

El remate de las jornadas será la Carta Verde, "el documento de compromisos para hacer nuestras ciudades más sostenibles, más inteligentes y más amables. Estamos trabajando en un principio de acuerdo que espero que vea la luz esta semana, que podamos desarrollar, completar y ampliar durante todo el año". 

Pero, para el desarrollo de acciones, recordó que es necesario "la unión de las ciudades" pero también el dinero. "Las ciudades Mission necesitamos un marco financiero plurianual estratégico y específico. Tenemos el mandato de la Comisión Europea y nuestro compromiso de enseñar el camino al resto de ciudades europeas para ser climáticamente neutras en 2050. Pero no podemos hacerlo solos. Necesitamos el apoyo de la Comisión y nuestras iniciativas deben tratarse y financiarse de forma específica, saliendo del marco genérico del resto de las ciudades. La Comisión nos ha elegido para ser el espejo donde mirarse otras ciudades y, por tanto, necesitamos una financiación exclusiva. Es imprescindible que se cree un “Fondo Mission” que financie nuestros proyectos, donde exista un compromiso económico a nivel europeo, nacional, regional y local.  Los Estados Miembros no deben limitarse a ser meros observadores externos, deben de implicarse económicamente porque somos las ciudades las que crean país, y son los países los que crean Europa.

Así que hago un llamamiento a una mayor implicación. Las Ciudades Mission son una forma de hacer Europa, y de acercar Europa a nuestros ciudadanos".