Los jóvenes de València exigen a Catalá "respuestas valientes" ante el problema de la vivienda

Los representantes de la juventud firman un manifiesto con ocho medidas, avaladas también por la federación de asociaciones vecinales, donde reclaman desincentivar la acumulación de vivienda vacía, limitar los pisos turísticos o crear una comisión municipal de vivienda con la presencia del CJV

Los jóvenes de València firman un manifiesto por una vivienda digna

JM López

Claudio Moreno

Claudio Moreno

A los pies del Ayuntamiento de València, con la voluntad de llamar la atención de quien gobierna el destino de la ciudad, los representantes de los jóvenes valencianos han firmado un manifiesto con ocho medidas encaminadas a facilitar el acceso a la vivienda digna, algo que hoy resulta imposible para buena parte de los jóvenes de las capitales españolas. 

El texto ha sido respaldado por Pablo Bottero, presidente del Consejo de Juventud de València (CJV); María José Broseta, presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos de València, Javier Esquerdo, delegado de Estudiantes de la UPV; y Laura Nebot, presidenta de la mesa de la Asamblea General de Estudiantes de la UV. En él se empieza constatando una realidad: los datos “son dramáticos”. Solo 1 de cada 10 jóvenes puede permitirse alquilar un piso en València, compartir habitación o heredar una vivienda. No antes de los 30 años y destinando el 70% de su salario a hacer frente a los gastos de alquiler. Para la gran mayoría, emigrar o refugiarse en las afueras son las pocas opciones que quedan. 

Esta “insostenible” situación, señala el manifiesto, se nutre de la acumulación de pisos y especulación urbanística por parte de varios fondos buitre, una laxa regulación de los apartamentos turísticos y la escasa oferta pública de vivienda, generando de este modo “una burbuja artificial de subida desproporcionada de los precios que ya superan los 1.200€ de media, cinco veces por encima del aumento de los salarios”. Frente a ello, los jóvenes, pese a estar altamente formados, tratan de sobrevivir a la precariedad de los salarios bajos, con un paro estructural del 30% y una elevada temporalidad y parcialidad en la ocupación. 

“Más allá de individualismos, todo esto representa un problema social de primera magnitud, el cual exige respuestas valientes y contundentes por parte de los poderes públicos que legislan y regulan las políticas de vivienda”, han pedido los integrantes del CJV, una plataforma que desde hace 30 años engloba a 40 entidades juveniles de la ciudad –también están las canteras de los partidos políticos, salvo Vox–. En alianza con los estudiantes y la federación de vecinos, los jóvenes valencianos han reclamado a Catalá las siguientes medidas: 

Hacer cumplir la ley por el derecho a la vivienda de València; limitar la expansión desmesurada de apartamentos turísticos; ampliar la red pública de vivienda municipal y reducir las listas de espera de Aumsa; desincentivar la acumulación de vivienda vacía; formar a los jóvenes en materia de emancipación; considerar las ayudas al alquiler como una medida paliativa, no estructural; crear una comisión específica municipal que siga el problema y proponga soluciones; y dar entrada al CJV en el Consejo Social de la Ciudad, donde se deben debatir estas propuestas. 

El grafitero J.Warx denuncia la situación de la vivienda en València con un mural

El grafitero J.Warx denuncia la situación de la vivienda en València con un mural / Laura Ballester

Ampliar el parque público de vivienda

Antes de la firma del manifiesto, Bottero ha valorado positivamente que el ayuntamiento trabaje en ampliar el parque de vivienda al estilo de Viena y ha celebrado la buena sintonía del Consell de Joventut con el actual concejal de Urbanismo, Juan Giner, pero también ha llamado a regular los alquileres de los grandes tenedores, “con casas cerradas esperando a abrirlas cuando los precios suban”. Asimismo, Bottero ha identificado como la medida más urgente la moratoria a los apartamentos turísticos de toda la ciudad y ha reclamado una mejor interlocución con la concejalía de Juventud, en manos de Mónica Gil, de Vox. 

Por su parte, la presidenta de la federación de asociaciones vecinales ha coincidido en exigir un paso adelante de todas las administraciones ante el incremento “desorbitado de los precios”, un problema que afecta a los jóvenes pero también a los mayores con pensiones exiguas. “Se habla de buscar soluciones, pero no se hace nada. Nosotros queremos ver hechos ya, desde hoy. El problema de acceso a la vivienda no es algo que se pueda dejar para el año que viene”, ha insistido Broseta. 

Limitar las "jaulas para turistas"

Preguntada por la proliferación de bajos turísticos, la representante de los bajos turísticos ha lamentado ver barrios “colapsados” por este negocio –“zulos” en palabras de Broseta, “jaulas” a ojos de Bottero– que en muchos casos es legal o alegal, pero en otros llega a ser ilegal. “Esos hay que cerrarlos ya”, ha insistido reclamando urgencia de las actuaciones municipales, porque València “ya es una zona tensionada” en toda su extensión. “Antes el problema estaba en determinados barrios. Ahora está en todos e incluso en las pedanías. Es algo muy grave”, ha denunciado.  

Finalmente, Laura Nebot y Javier Esquerdo, en representación de los estudiantes valencianos, han hablado desde su propia realidad: universitarios obligados a costear habitaciones con precios abusivos, en pisos poco o nada preparados, y con contratos de un solo año que el casero encarece a la mínima ocasión. “Las entradas a las hipotecas ya son más baratas que un alquiler. Se nos está impidiendo tener un proyecto de vida cuando acabamos la universidad”, han resumido. 

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