Los técnicos del Servicio de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Valencia han redactado un informe sobre el valor de los jardines adosados a las fachadas de la catedral de Valencia que concluye que únicamente merece la pena conservar los olivos. En base al citado informe, el ayuntamiento está dispuesto a dar luz verde a la eliminación de los jardines tal como reclama desde hace años el cabildo y el restaurador de la Catedral, Salvador Vila. El ayuntamiento se ha comprometido a aprobar la eliminación del jardín en el momento en que, por las condiciones ambientales, sea más aconsejable llevar a cabo el traslado de los olivos.
El cabildo ha retomado la negociación con el consistorio para eliminar el jardín coincidiendo con la restauracion de la fachada de la catedral recayente a la plaza de la Reina.
Salvador Vila insistió ayer en que «es necesario quitar el arbolado». «Es un elemento añadido hace 30 años y que no tiene ningún valor histórico», añade el arquitecto quien recalca que las zonas arboladas que mantiene el ayuntamiento se encuentran en suelo del arzobispado. Vila insiste en que el riego de los jardines está provocando «desprendimientos en la piedra por humedad». Además mantiene ocultos elementos «magníficos» como gárgolas y ventanas.
