Una anciana mata a su compañera de habitación en una residencia de Chiva

La Guardia Civil investiga los hechos y, a la espera de la autopsia, todo apunta a que la víctima, de 96 años, habría muerto asfixiada

La presunta homicida, de 92 años y con problemas de demencia senil, podría ser inimputable dada su salud mental

Residencia de la tercera edad de Chiva donde se ha producido el crimen.

Residencia de la tercera edad de Chiva donde se ha producido el crimen. / Levante-EMV

La Guardia Civil investiga un nuevo crimen en la provincia de València. En esta ocasión el lugar donde se ha producido esta muerte violenta, presuntamente de etiología homicida, es una residencia de la tercera edad en pleno centro de Chiva. Al parecer, una residente de 92 años habría acabado con la vida de su compañera de habitación, también nonagenaria, en la mañana de ayer por causas que se investigan. El cadáver de la víctima fue encontrado por una de las trabajadoras del centro con síntomas de asfixia.

Responsables de esta residencia pública para personas mayores alertaron a la Guardia Civil ayer a media mañana informando del fallecimiento de una residente en aparentes extrañas circunstancias. Una de las trabajadoras fue la que dio el aviso al entrar en la habitación para preparar la medicación de las residentes y se percató de que una de ellas, una mujer de 96 años, estaba en la cama sin vida.

Cuando los primeros agentes del Instituto Armado llegaron al lugar comprobaron que la nonagenaria presentaba signos de haber sido presuntamente asfixiada por una tercera persona. Todo apunta a que la presunta autora de su muerte es su compañera de habitación, una mujer de 92 años y con problemas de demencia senil.

Hasta el lugar se desplazó la comisión judicial, con el forense de guardia. En una primera inspección del cadáver el experto del Instituto de Medicina Legal de València comprobó que el cuerpo presentaba síntomas compatibles con una muerte por asfixia.

La jueza de Instrucción número uno de Requena, en funciones de guardia, autorizó el levantamiento del cadáver pasado el mediodía. El cuerpo fue trasladado al IML de València donde hoy se le realizará la pertinente autopsia para determinar la causa exacta del fallecimiento, y confirmar, como todo apunta, que se trata de una muerte violenta de etiología homicida.

Agentes del equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Riba-roja se han hecho cargo de la investigación para esclarecer las circunstancias de esta muerte. Por el momento, y a la espera de la autopsia, al cierre de esta edición no se había detenido a la presunta homicida.

Los investigadores tendrán que tomar declaración ahora a los distintos trabajadores de este centro para personas mayores, situado en la calle Alcalde Urbino Blay Mañez, para intentar recabar información sobre la relación entre la víctima y su presunta homicida, ambas con problemas de demencia que dificultaban su convivencia, según las fuentes consultadas por este periódico.

Un centro de la Generalitat

La residencia en la que se produjo el presunto crimen cuenta con 95 plazas públicas para personas de edad avanzada dependientes. El centro, gestionado por la conselleria de Igualdad y Bienestar Social, cuenta con un servicio médico y psicológico disponible 40 horas a la semana para estos mayores asistidos y supra-asistidos.

La anciana sospechosa de haber matado a su compañera, de 96 años, tendrá que ser sometida a un examen psiquiátrico. De confirmarse su demencia sería inimputable y estaría exenta de responsabilidad por el presunto crimen.