El juez de Instrucción número 4 de Llíria, en funciones de guardia, decretó ayer libertad provisional para Cecilia P. G., la mujer de 41 años detenida en la madrugada del jueves en Riba-roja por intentar matar a su marido sedándolo con barbitúricos y golpeándolo después con una sartén, cuando ya había perdido la consciencia. El magistrado, a petición de la Fiscalía, ha ordenado que la inculpada comparezca semanalmente ante el juzgado para garantizar su presencia para cuando se celebre la vista oral.

El juez, según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), ha abierto causa por un delito de homicidio en grado de tentativa, si bien esa tipificación podría cambiar a lo largo de la instrucción.

La Guardia Civil condujo ayer por la mañana a Cecilia al Juzgado de Guardia de Llíria, una vez que los médicos del Hospital La Fe, en cuya unidad de psiquiatría había sido ingresada tras el intento de homicidio, recibió el alta médica.

Los hechos, tal como publicó ayer Levante-EMV, se produjeron en la madrugada del jueves, cuando la mujer, según confesaría más tarde, ofreció a su marido, Pascual G. T., de 47 años, un poleo en el que había disuelto abundantes comprimidos de una benzodiazepina Diazepam con el fin de sedarlo.

Una vez que el hombre perdió la consciencia, trató de matarlo golpeándole con una sartén, pero al verle sangrar, se arrepintió y llamó al 112 pidiendo ayuda médica. En el domicilio, sito en la calle Rey en Jaume de Riba-roja, se encontraban también los tres hijos del matrimonio, que no fueron conscientes de los hechos.

La agresión se produjo horas antes de que la pareja compareciese, por separado, ante los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Riba-roja, que los habían citado después de que la Policía Local recibiese una denuncia anónima formulada desde el entorno de Cecilia por supuestos malos tratos psicológicos que la mujer no se había atrevido a denunciar formalmente.