La Safor, cuna de las mejores orquestas valencianas

¿Por qué en la comarca de la Safor están las mejores orquestas de la Comunitat Valenciana? Algunos factores que pueden explicarlo son la tradición de la música de banda, con una extensa red de escuelas y sociedades en la comarca, una economía donde el turismo y la industria del entretenimiento ha sido un pilar importante desde los años 60, la pervivencia de las verbenas durante las fiestas de sus pueblos, con el apoyo de los ayuntamientos, y la aventura de varios emprendedores, muchos de ellos también músicos, que apostaron por este modelo de negocio. 

De hecho, en algunos casos como la orquesta Montecarlo (con más de 40 años de historia) o la Titanic, lo que empezó como una pequeña banda hoy se ha transformado en grandes empresas que han diversificado sus actividades ofreciendo todo para el espectáculo y para los eventos, no sólo conjuntos de varios componentes, teatros musicales, discotecas móviles o espectáculos de variedades, también la logística como escenarios, carpas, vallas, mesas o sillas. 

En total hay trece orquestas donde elegir. La principal empresa, por volumen de mercado, es Montecarlo Representaciones, de Gandia, que lleva a la Montecarlo (este año será el último de Eduard Forés como cantante), Euforia, Seven Crashers, Scream y Twister. El Grupo Platino, con sede en l’Alqueria de la Comtessa, cuenta con la Platino, Gravity y la Human. El Grupo Titanic, de Gandia, ofrece la Titanic, la No Comment y la Emoji. Y Espectáculos La Tribu tiene a la orquesta del mismo nombre y a la Límite. 

Orquestas que estos días de verano trabajan a buen ritmo, aunque la percepción generalizada en el sector es que este año no hay tantas fechas como en 2023. Lo apunta Yarny Mesa, cantante de la Platino, y prácticamente mano derecha de Paco Escrivà, quien la fundó en el año 1984. «Tras la pandemia, parte de 2021 y en 2022 hubo un resurgir de las orquestas, el público tenía muchas ganas, pero estamos notando que ahora están más de moda las discomóviles, cosa que es una lástima porque no se valora la música en directo», se lamenta Yarny.

Estas discomóviles, a su vez, también han cambiado, incorporando bailarines explosivos, reguetón y una atractiva puesta en escena que está haciendo la competencia a las orquestas y comiéndose parte del pastel. Hasta el punto de que estas empresas, que también tienen a discomóviles en su cartera, ofrecen una combinación de orquesta y DJ Set, para no perder espectadores cuando se acaba la primera parte de la orquesta, algo que suele ser habitual. 

En cualquier caso, pese a que las discomóviles muevan a mucha gente joven, es indudable el mérito y el esfuerzo de estos músicos y cantantes, que normalmente compaginan este oficio con otros trabajos principales y se ponen en la carretera varias veces por semana para ofrecer un espectáculo de cuatro horas sobre el escenario. Recorren toda la Comunitat Valenciana y algunas veces tienen bolos en la Mancha o en Aragón.  

Por otra parte, el sector, que estuvo unido durante la pandemia, actualmente está viviendo una guerra de precios que al final lo único que hace es presionar a la baja los cachés de las formaciones. 

Las orquestas de la Safor no arrastran tanto «fandom» como las gallegas, que a su vez son las mejores de España, ni hay tanto mercado de fichajes de los cantantes cada cambio de temporada como sucede allí, pero también se han labrado un nombre. Desde Galicia la Panorama ha creado escuela con sus enormes pantallas, las coreografías, su cuidado vestuario y sus giras temáticas. 

La Platino ha adoptado ese estilo. Fueron pioneros en implantar los mixes, es decir, ellos apenas cantan un tema completo, sino fragmentos. Miguel, uno de los cantantes, monitor de gimnasio, de Alzira, ha contado las canciones que interpretan así en cada show: unas 130. Además, le dan mucha importancia a la puesta en escena, los cantantes se cambian de vestuario unas cinco veces. 

Está formada por tres cantantes principales; Miguel Toledano, Yarny Mesa y Joel Maties, y por los músicos José Alarcos (bajista), Jorge Camarero (guitarra), Miguel Ángel Cuadrado (teclista) y la batería Laura Moya. 

La Platino suele montar un escenario de 11 metros de ancho por ocho de fondo, y si se puede una altura máxima de ocho metros. El equipo de sonido tiene una potencia de 36.000 vatios. Desde hace un par de años están apostando por las pantallas LED, y llevan una de 23 metros cuadrados. 

La Safor, tierra de las mejores orquestas

En cuanto al repertorio, que preparan entre el otoño y la primavera, innovan aunque no necesariamente sea con canciones actuales. Por ejemplo, este año han apostado por los Back Street Boys, el «Pedro» de Raffaela Carrá, o «Tanto la quería» de Andy y Lucas.

No pueden faltar versiones de Aitana, Ana Mena, y por supuesto, «Zorra» de Nebulossa. A veces el éxito de una canción les obliga a prepararla sobre la marcha, como ha pasado este verano con «La Potra Salvaje», de Isabel Aaiún, tras su último remix. 

Otra de las grandes es la Titanic, que lleva 20 años en la carretera. Paco Muñoz es su gerente. «Con el tiempo ya conocemos los gustos del público y de cada pueblo, y nos sabemos adaptar, por ejemplo en Castelló sigue gustando mucho el pasodoble», comenta. 

La Titanic la forman José Cebrián, Daniel Pérez, Silvia Ladrón y Naiara Cuenca (cantantes), Vicente Escrihuela «El Llopo» (guitarra), Miguel Alfaro (guitarra), Marcos Carabante (bajo) y Daniel Muñoz a la batería. Federico Rizzo es el director musical. Acuden con un equipo de más de 30.000 vatios de sonido, 20 metros cuadrados de pantallas LED y robótica, e incorporan efectos como humo vertical o confeti. 

Al igual que los responsables de la Platino, Paco Muñoz confirma que, en general, las orquestas están perdiendo fuelle frente al concepto moderno de discomóvil, aunque matiza que en 2023, al ser año electoral, hubo mucha contratación por parte de los ayuntamientos. Este año tampoco les va mal. «Cumpliremos los objetivos con unas 60 fechas anuales y ya tenemos pueblos firmados para 2025», precisa.