Economía

Casi el 70% de los municipios de la Safor están totalmente saneados

Ocho ayuntamientos, sin contar Gandia, tenían deuda al cierre del 2023 pero solo en uno supera los 500 euros por habitante nSeis pueblos dejaron de tener obligaciones bancarias pendientes

El ayuntamiento de Piles

El ayuntamiento de Piles / Levante-EMV

Los ayuntamientos de la Safor están saneados a nivel económico. Así lo confirma el propio Ministerio de Hacienda, que acaba de hacer público el estado de la deuda viva de los municipios. Y es que, tras mucho tiempo haciendo bien los deberes, las cuentas municipales cuentan con muy buena salud.

Si se quita el caso de Gandia, cuya deuda, 260 millones de euros, es de las más elevadas de España, aunque en estos momentos está controlada y encarrilada, los apenas ocho municipios que a día de hoy mantienen obligaciones pendientes de pago con las entidades bancarias, es perfectamente asumible con sus ingresos anuales y no condicionan de forma importante las cuentas municipales.

Son, además, seis menos que el ejercicio anterior, ya que salen de la lista las localidades de Alfauir, que pasa al privilegiado grupo de los que no deben nada, Benirredrà, Benifairó de la Valldigna, Castellonet de la Conquesta, Ròtova y Villalonga.

En cambio, hay varias localidades que no tenían deuda y que en 2023 pasaron a deber dinero a los bancos, como es el caso de Oliva y Ador, aunque son cifras más que asumibles.

La localidad que más debe a los bancos actualmente en global es Tavernes de la Valldigna, con poco más de 2,5 millones de euros, una deuda que aún arrastra de 2011, cuando llegó a acumular 27 millones y el consistorio quiso poner el contador a cero para recuperarse.

El municipio, en todo caso, cuenta con una ratio de endeudamiento del 0,14%, lo que por habitante significan apenas 140 euros.

El ayuntamiento podría, de hecho, hacer frente a toda la deuda pero fuentes municipales explican que hacerlo supondría no disponer de fondos para llevar a cabo inversiones o cubrir otro tipo de gastos, por lo que es más factible devolverlo como se está haciendo, de forma sostenible sin comprometer el equilibrio presupuestario e incluso logrando superávit.

La situación de Piles, sin embargo es distinta. Esta localidad registra una deuda de 1,2 millones de euros, lo que supone unos 520 euros por habitante. Según la información que ha hecho pública el Ministerio de Hacienda, esta localidad incrementa de forma considerable su deuda, ya que en el ejercicio 2022 tenía pendientes de pago 672.000 euros.

Xeraco mantiene una deuda de 1,1 millones, a razón de menos de 200 euros por cada vecino y vecina, y Xeresa supera en poco el millón.

Por debajo de ese umbral se encuentra Oliva, con 208.000 euros. Es otro de los pocos ayuntamientos que incrementa su deuda respecto al ejercicio anterior, según los datos que ofrece Hacienda, ya que en 2022 no debía nada. Guardamar de la Safor, por su parte, suma 239.000 euros. Los 9.000 que registra Ador son prácticamente una anécdota, pese a que el año anterior también tenía deuda cero.

21 consistorios sin deuda

El resto de los 21 ayuntamientos de la Safor presenta deuda cero, ya que en los últimos años los que aún tenían alguna obligación pendiente con los bancos la ha ido liquidando gracias al buen funcionamiento de las haciendas locales, que han permitido superávits y remanentes de tesorería positivos. Y es que hubo muchos consistorios que le vieron las orejas al lobo, cuando se dieron cuenta de que se había gastado bastante más de lo que se tenía. Fueron tiempos en los que se tardaban no meses, sino incluso varios años, en pagar a los proveedores.