Reducción de los servicios sanitarios durante el verano

Alarma en Cullera por el cierre parcial del consultorio médico de El Raval

Los vecinos del barrio que necesiten atención médica deberán irse a Sueca

La conselleria alega que no encuentra médicos

Vista exterior del consultorio del Raval.

Vista exterior del consultorio del Raval. / Levante-EMV

El verano sanitario va a ser tan abrasivo y seco como el tiempo meteorológico. Encontrar un médico costará más que de costumbre ante la necesidad de distribuir las vacaciones estivales y la enorme dificultad de encontrar médicos disponibles para cubrir las bajas. Las carencias de personal han obligado a reducir los servicios que se prestan y los recortes van a ser generalizados, aunque resultarán más sensibles en las poblaciones del litoral, donde la masiva afluencia de turistas y visitantes puede complicar mucho la atención que se ofrecerá a los pacientes. El punto más conflictivo será Cullera.

Finalmente no se cerrará el consultorio del Faro, aunque se reducirá mucho el horario de atención, pero sí que se verá muy resentida la asistencia que se presta en el consultorio de El Raval. Los pacientes adscritos a esa área que necesiten acudir al médico deberán trasladarse al Centro de Salud de Sueca, ya que los dos facultativos asignados son necesarios para reforzar otros puntos. En el Raval sólo permanecerán abiertos los servicios de matronas, psicología y una trabajadora social.

El Centro de Salud Integrado de Cullera mantendrá la atención que presta las 24 horas del día. El consultorio del Oasis trabajará de 8 a 15 horas. Ambos servicios se han reforzado con médicos.

Carencia de médicos

«El plan de refuerzo y sustituciones veraniegas ha sido diseñado teniendo en cuenta la limitada disponibilidad de personal, marcada por una carencia general de médicos de familia en toda España. Además, este año, no se podrá contar con los residentes que finalizan su formación en septiembre, en lugar de mayo como era habitual», apuntan fuentes del Departamento de Salud de la Ribera, que también destacan el «significativo esfuerzo que se llevado a cabo para organizar y contratar personal para garantizar una cobertura óptima ante el incremento demanda asistencial durante el verano en algunas zonas».

Los responsables sanitarios de la comarca aseguran que «mantendrán una comunicación constante con los responsables de los centros de salud y consultorios en las zonas turísticas para evaluar la situación y tomar las medidas necesarias en caso de que se produzcan picos asistenciales superiores a lo previsto». Todas las decisiones, estarán sujetas a la disponibilidad de médicos dispuestos a realizar sustituciones», una tarea que no va a resultar muy fácil.

Protestas vecinales

Vecinos del barrio de El Raval de Cullera se mostraron ayer muy preocupados al considerar que la ausencia de médicos ocasionará «graves problemas para los vecinos de un barrio alejado del centro de salud, en especial a las personas mayores y enfermos crónicos que tengan que desplazarse para ser atendidos o simplemente para realizar sus consultas o la extracción de sus recetas». Los residentes no descartan organizar concentraciones de protesta. 

El alcalde de Cullera, Jordi Mayor, cargó ayer contra la gestión sanitaria del PP y Vox: «Este es el manejo sanitario de PP + VOX, ‘el cambio se cumple’, dicen. No nos importa quién gobierne la Generalitat, estaremos como siempre al lado de los vecinos para reclamar la atención sanitaria que merece la localidad de Cullera!», apuntó la primera autoridad social a través de las redes sociales.  

Llombai clama contra el cierre de su servicio asistencial

El gobierno municipal de Llombai, integrado por representantes de Compromís, que ostenta la alcaldía, y del PSPV-PSOE, ha alertado de que el municipio se verá afectado por la decisión de la Conselleria de Sanidad de mantener cerrado el consultorio médico durante los meses de verano. «Esta decisión del Consell afecta en toda la población, que tendrá que desplazarse a Catadau durante estos meses», lamentó ayer el ejecutivo municipal, que deplora que los más perjudicados vayan a ser «las personas mayores con pocos recursos, o ninguno, que estarán obligados a acudir al hasta el pueblo vecino si necesitan atención médica». 

El ayuntamiento pronostica que los pacientes «tardarán más tiempo en ser atendidos, puesto que la capacidad del centro sanitario de Catadau no puede cubrir todas las necesidades del Marquesat, mucho más en esta época del año, cuando los tres municipios sufren un aumento considerable de población al llegar la temporada estival por la gran cantidad de urbanizaciones de chalés existente en la zona. «Por estos motivos, reclamamos a la Conselleria de Sanidad que recapacite en su decisión puesto que ese recorte afecta en los tres pueblos del Marquesat», precisó ayer el gobierno municipal.