La solidaridad ayuda a repatriar al niño que se ahogó en Alzira

El club de fútbol en el que militaba Adam y el colegio Tirant Lo Blanc recaudan los 3.500 € que ha costado trasladar el cadáver a Marruecos

El alcalde de Alzira abraza a una hermana de Adam junto a la madre y la hermana mayor (a la derecha).

El alcalde de Alzira abraza a una hermana de Adam junto a la madre y la hermana mayor (a la derecha). / Rober Solsona /EP

El cadáver de Adam, el niño de once años que se ahogó hace ocho días en aguas del Xúquer, ya ha sido repatriado a Marruecos, su país de origen. Ese era el deseo de la familia y el miércoles partió por vía área donde ya le esperaba la familia para activar los rituales funerarios propios de la religión musulmana. El club de fútbol Ciutat d’Alzira, en el que militaba el menor, y el colegio en el que cursaba sus estudios, el CEIP Tirant Lo Blanc, han recaudado fondos para cubrir los gastos del traslado en una iniciativa que no fue solicitada por los padres del pequeño sino que surgió de manera espontánea de los compañeros de la entidad deportiva y que también se extendió entre la comunidad escolar. 

Adam y algunos de sus amigos y compañeros del equipo alevín en el que jugaba tenían por costumbre acercarse al embarcadero del río, situado a unos metros de los campos de entrenamiento, y en ocasiones se lanzaban al río para refrescarse. Para ellos solo era un juego, pero el jueves la aventura acabó en tragedia. A las siete de la tarde cruzaron el cauce para acercarse a las piraguas y cuando regresaban se hundió. Dos colegas, como ya había ocurrido otras veces, trataron de ayudarle, pero le perdieron la pista. No sabía nadar.

Apoyo a la familia

La Policía Nacional activó un rápido plan de rescate, que incluyó un helicóptero provisto de cámara térmica, aunque el hallazgo del cadáver no llegó hasta minutos después de las diez de la mañana del viernes. Tres días después, los padres y los dos hermanas deAdam comparecieron ante decenas de ciudadanos durante el minuto de silencio convocado por el ayuntamiento y agradecieron, entre sollozos, la solidaridad mostrada por Alzira, que sin ambargo, no acabó ahí. El club de fútbol y la escuela consiguieron entregarles el martes los 3.500 euros que la familia necesitaba para cubrir los gastos de la repatriación.

El rito musulmán concede una gran importancia al duelo. La familias están muy unidas en esos difíciles momentos entre ellas y con el resto de su comunidad. Adam va a dejar un gran recuerdo a ambos lados del Mediterráneo.