El juzgado 4 de Sueca se colapsa por carecer de personal y espacio

El recinto, instalado en un bajo comercial, no cumple las condiciones mínimas de habitabilidad ni seguridad

Solo trabajan dos de los seis empleados

Bajo que ocupa el juzgado de primera instancia e instrucción número 4 de Sueca.

Bajo que ocupa el juzgado de primera instancia e instrucción número 4 de Sueca. / Joan Gimeno

El Colegio de Abogados de Sueca ha denunciado el colapso y la paralización del juzgado de instrucción número cuatro de la capital de la Ribera Baixa, provocado por la falta de personal y de espacio. De un total de seis funcionarios que deberían integrar la plantilla solo hay operativos dos empleados y uno de ellos acaba de incorporarse a su puesto de trabajo. Ello ha supuesto el colapso y una paralización absoluta del juzgado. «No se pueden incoar nuevas causas y los innumerables expedientes se amontonan en la mesas sin nadie trabaje en ellos, lo que produce impotencia y rabia», detallan los letrados y procuradores.

Los afectados exigen medidas «inmediata y urgentes». Las quejas del magistrado y de los funcionarios han caído hasta ahora en saco roto.

Un local sin condiciones

Los abogados también reprochan «la mala situación» del local que alberga ese juzgado. Es uno de los tres que se encuentran en una sede diferente y alejada del Palacio de Justicia de Sueca, a unos dos kilómetros, «lo que provoca confusión en los justiciables y profesionales de otros partidos judiciales que desconocen la ciudad de Sueca, y conlleva retrasos en la celebración de las vistas e incluso situaciones de indefensión, puesto que llegar tarde a la celebración de un juicio, hecho bastante usual por las causas reseñadas, supone la pérdida del pleito», subrayan los letrados del colegio suecano.

Igual o más perjudicados se sienten los ciudadanos «que están sufriendo y van a continuar sufriendo, si no se soluciona el problema, grandes retrasos en su petición de justicia», enfatiza el Colegio de Abogados, que también recuerda que una justicia lenta no puede considerarse justa. 

La sede utiliza como sala de detenidos una dependencia que es realmente un trastero, con unas condiciones ínfimas de seguridad y de habitabilidad. Si son varios los detenidos, deben permanecer en el interior de los vehículos policiales. Es prácticamente imposible que el abogado pueda mantener una conversación reservada con el detenido sin que se enteren los funcionarios, fuerzas de orden público y resto de personas que están en las dependencias judiciales. 

Ni ventilación ni luz natural

La sala de vistas no reúne las condiciones exigidas por la legislación en materia de salud e higiene en el trabajo. No existen salidas de emergencias, ni ventilación, ni luz natural, excepto en la entrada y en la sala de vistas, que está al lado de la entrada . «Probablemente este sea uno de los motivos de la gran cantidad de bajas laborales que se producen», señalan los afectados.

 No constan alarmas anti-incendios, ni planes de evacuación en caso de incendio, lo que constituye un potencial peligro para la vida y salud de los usuarios y trabajadores. Esos graves defectos podrían favorecer el traslado del juzgado a las nuevas instalaciones habilitadas en Ronda Cabañal,10, donde se hallan ubicados los juzgados de primera instancia e instrucción nº 6 y el Juzgado de Violencia sobre la mujer nº 1 con todos los adelantos e innovaciones.