El trenet de la Granadella de Xàbia se queda corto: lo cambian por un bus con 49 plazas

Al tren turístico, de 26 plazas, no se le podían enganchar más vagones ya que se atascaba en la serpenteante y estrecha carretera

El autobús es abierto y también permite disfrutar del trayecto entre pinadas que lleva a la cala

¿Trenet o bus? Lo importante es llegar cómodamente a la cala de la Granadella

¿Trenet o bus? Lo importante es llegar cómodamente a la cala de la Granadella / A. P. F.

Alfons Padilla

Alfons Padilla

Que nadie se quede en tierra. El esperado trenet turístico de la Granadella de Xàbia no daba más de sí. Todo era hacer viajes: carretera abajo, carretera arriba. Se llenaba en un periquete de bañistas. Sus 26 plazas se quedaban muy cortas. Y no se le podían enganchar más vagones. La serpenteante carretera es estrecha. Demasiada maniobra. El tren turístico se atascaba en las cerradas curvas.

La empresa que gestiona el transporte público de la cala de la Granadella ha optado por aparcar el trenet y arrancar el bus. Desde el pasado sábado, el autobús turístico baja y sube a la Granadella. Tiene 49 plazas. Ya es otra cosa. Los turistas no se quedan en tierra, sino que llegan cómodamente a la orilla de la Granadella, una de las playas de más tirón de la Comunitat Valenciana.

El nuevo bus de la cala de la Granadella

El nuevo bus de la cala de la Granadella / A. P. F.

El viaje de ida y vuelta vale 5 euros. Es un chollo. Aparcar en la Granadella cuesta 9 euros al día. Y eso si se madruga mucho y se llega antes de que los vigilantes bajen la barrera. Las plazas para estacionar, situadas en el zigzagueante y tortuoso vial del Pic Tort, se llenan rápidamente. El trenet y ahora el bus ahorran meterse con el coche en el atolladero de la Granadella. También se evitan darse una caminata de aúpa (y cargados con todos los cachivaches playeros). Vale la pena que te lleven. El bus es cómodo y está muy ventilado.

Al igual que el trenet, el autobús es abierto. Corre el aire y los bañistas disfrutan de las vistas. La carretera es muy pintoresca. Culebrea entre pinadas (ahora marrones y secas, eso sí).

Sin barreras para el transporte público

Del trenet al bus, lo importante es que los bañistas sepan que tienen esta alternativa y la utilicen. El transporte público evita el colapso de coches. Todavía hay turistas que no saben que se ha puesto en marcha el transporte público y se meten con su coche en una cola que no lleva a ninguna parte. Llegan a la barrera y allí los controladores les dicen que no pueden pasar y que tienen que volver atrás. Y eso frustra. No pueden zambullirse en la cala de aguas esmeralda. Para el transporte público no hay barreras.