La más madrugadora en ser nombrada fallera mayor

Camino de Alba-Castillo de Cullera mantiene la costumbre de elegir y nombrar falleras mayores en seguida. «El primer fin de semana de abril». La foto de María fue de las primeras en aparecer en la actividad del ejercicio 22-23. Visto al revés, las falleras mayores acaban verdaderamente con la «cremà»-salvo los actos propios de las salientes-. Y María Solera busca ahora una prórroga para todo el ejercicio de 2024. Esa prolongación que buscó hace quince años. Porque, imagínenlo, es una más de las que llegó a la gran final en edad infantil. «Fui fallera mayor en 2007 y preseleccionada. Sigo teniendo relación con candidatas que compartimos el proceso. Por eso tengo muchas ganas de volver a vivirlo». Veinte años hará desde la anterior presencia de la comisión en los cargos representativos, donde estuvo Aida Bea en 2004.

Patrimonio de la Humanidad por origen y por afición

Enfermera de bata blanca y fallera de «parka reversible»

La baza de la otra marea «taronja» en la Fonteta

No uno ni dos: 23

María es de allí, de la falla junto a la iglesia de La Torre, en una definición perfecta: más que de «comisión familiar», de «comisión de la familia». «En mi casa, cuando naces, te hacen fallera. No está en discusión. Somos 23 componentes de mi familia los que estamos allí. He nacido y he vivido con la falla». Y tiene una explicación en la historia familiar: «mis abuelos se asentaron allí. Venían unos de Alcázar de San Juan y otros de la Huerta del Marquesado. Fueron los primeros y luego ya las siguientes generaciones». Mantiene toda la vinculación del mundo con Huerta. Tanto, como que el mismo día de la sesión de entrevistas se marchaba para allí «que son las fiestas».

Una vida en danza

En lo personal-profesional está ligada al mundo de la danza «pero la pandemia me pasó mucha factura: estaba bailando con la Orquesta de València y aquel marzo se me paralizó todo. Ahora tengo la suerte de trabajar cara al público, con el cliente, sobre la danza. Trabajo con escuelas y creo eventos. Por ejemplo, en abril hice el Internacional de la Danza y participaron 120 niñas. Quedó muy espectacular. Me motiva mucho trabajar ese tema. Estoy formada en una escuela privada. Ahora mismo ya me quedo con la organización. El otro es un mundo muy complicado, con el que no hay una cultura de la danza. No estamos acostumbrados a ir al teatro. Que no quita para que no me guste muchísimo bailar».

Más, pero bastante más complicado lo tendrá si en enero se sube a otro escenario, el de la exaltación: cómo conseguir entrada para los 23.

Retrospectiva de la presentación de las candidatas a fallera mayor de València (2018-2023)

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Las candidatas a Fallera Mayor e Infantil de València 2024 cierran la Fira en la Batalla de Flores

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