Urbem negocia con Cleop la compra de su parte para zanjar las disputas

Urbem, empresa controlada por la familia Pastor, informó ayer de que está en plena negociación con Cleop, que preside Carlos Turró, para comprarle su parte y acabar con años de disputas por el control accionarial. La histórica promotora y constructora valenciana reveló las negociaciones en un comunicado emitido anoche después de que Cleop informara a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de una sentencia del Supremo que valida el cese adoptado en septiembre de 2018 de José Pastor como administrador único y el nombramiento en el cargo de Carlos Turró.

Según el comunicado remitido a la CNMV, es la tercera vez que el Supremo falla a favor de Turró y decreta que Inversiones Mebru, filial de Cleop, «es propietaria del 55,2 %» de las acciones de Urbem». El comunicado apunta que por tanto «todos los acuerdos adoptados en las juntas generales de Urbem desde la celebrada el 14 de diciembre de 2006 están declarados nulos por sentencia firme a excepción del adoptado en la celebrada el 3 de septiembre de 2018 que eligió a Carlos Turró» como «administrador único de Urbem». Cleop sostiene que por tanto «resulta irregular la permanencia en la administración de Urbem» de la familia Pastor.

Versiones opuestas

Por su parte, José Pastor insiste en que «Turró carece de legitimidad para representar a Urbem pues nunca ha tenido la mayoría del capital social». Pastor sostiene que realmente tiene la mayoría accionarial (tras la compra de deuda de Inversiones Mebru reconvertida en acciones) y anuncia la convocatoria de una junta para nombrar administrador. 

Negociación

La familia Pastor incide en que desde 2018 ha adquirido 122.508 acciones de Urbem y controla «el 80,39 % del capital social de Urbem. «No obstante, queremos hacer constar que estamos inmersos en un complejo y delicado proceso de negociación con Cleop al objeto de alcanzar una solución satisfactoria y definitiva para las dos partes que zanje por completo las diferencias y permita a cada una continuar con su actividad después de tantos años de conflicto y desgaste innecesario», asegura la familia Pastor.

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