Reacciones

PSPV y Compromís retan a Mazón a convocar elecciones

La patronal descarta grandes cambios en el modelo económico mientras los sindicatos piden desmarcarse de Vox en inmigración

La líder del PSPV y ministra de Ciencia, Diana Morant, ayer ante los medios

La líder del PSPV y ministra de Ciencia, Diana Morant, ayer ante los medios / Germán Caballero

J.L.Z./D.A./J.L.G.

Cascada de reacciones a la salida de Vox del Consell con presión de la izquierda apuntando directamente a Carlos Mazón, a quien desde Compromís le reclamaron la convocatoria de elecciones y reivindicación de estar «preparados» por parte del PSPV; mientras que las organizaciones económicas, sindicales y sociales apelaron a la necesidad de un gobierno estable, con divergencia de opiniones sobre el papel de los voxistas en el gobierno autonómico en este año de mandato.

«Estamos preparados», indicó ayer la líder de los socialistas valencianos y ministra de Ciencia, Diana Morant, «somos la alternativa al gobierno más ultra». Fueron las palabras con las que reaccionó la dirigente del PSPV por la mañana en su visita a las Corts y a las que se remitieron en el partido una vez consumada la ruptura. Para los socialistas, es «llamativo» que esta haya llegado por parte de Vox y no del PP de quien señalaron que «nunca debería haber metido a la ultraderecha en las instituciones» y que Mazón ya es «indistinguible» de Vox.

También hacia el president de la Generalitat se dirigió el síndic de Compromís, Joan Baldoví, quien sí que reaccionó al anuncio de ruptura. Así, señaló que el pacto con Vox fue «una apuesta personal» de Mazón, del que ha asegurado que ha asumido «todos los postulados de la ultraderecha» y que la ruptura es un «fracaso» del jefe del Consell. Por ello, indicó, «solo tiene una salida: devolver la voluntad al pueblo valenciano y convocar elecciones, ya no tiene legitimidad para seguir gobernando».

Sin inestabilidad

Más centrados en la futura acción de gobierno, el presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), Salvador Navarro, sostuvo que la ruptura del Consell PP-Vox «no supone un mal mayor para el tejido empresarial de la autonomía porque la mayoría de las carteras económicas ya estaban en manos del Partido Popular», comenta el dirigente patronal en referencia a las conselleries de Hacienda, Economía, Industria, Comercio, Innovación, Turismo, Infraestructuras o Medio Ambiente.

En su opinión, la salida de los de Santiago Abascal de la Generalitat «tampoco supondrá grandes cambios en el modelo económico y social que propone Mazón en este territorio». Además, Navarro aseguró que los Presupuestos podrían salir adelante y no habrá inestabilidad económica. Misma línea que José Vicente Morata, presidente de la Cámara de Comercio de València, que se mostró convencido de que Mazón «será capaz de seguir gobernando en esta legislatura y ejecutando su programa de gobierno».

Para las organizaciones sindicales mayoritarias en la Comunitat Valenciana, CC OO y UGT, este nuevo escenario que afronta la administración autonómica es una operación de «puro marketing de Vox». Así lo señaló el secretario general de UGT, Ismael Sáez, quien aventuró que la desaparición de tres consellers del partido de extrema derecha «no supondrá cambios en el segundo escalón del Consell» y descartó elecciones anticipadas. Además, instó a Mazón a «desmarcarse de las políticas de Vox en materia de inmigración, sobre todo si son menores».

La secretaria general de CC OO-PV, Ana García Alcolea, aseguró que esta central sindical «siempre ha mantenido que la extrema derecha nunca debía haber entrado en el Gobierno autonómico, ocupando un espacio político e institucional donde recortar en derechos hacia las mujeres, el colectivo LGTBI, negando el cambio climático e incluso no compartiendo la propia configuración de las comunidades». En su opinión, «clama el marcado carácter xenófobo que les lleva a pedir que menores migrantes no puedan venir», lamentó la dirigente sindical.

Por su parte, la rectora de la Universitat de València, Mavi Mestre, apuntó que lo que necesitan las universidadespúblicas es «un gobierno fuerte con voluntad política de encarar decisiones inaplazables». Entre estas cuestiones cita de ejemplos la reforma de la financiación del sistema universitario público, la estabilización de plazas de profesorado o la transferencia de conocimiento a los sectores productivos.

Valorar la gestión diaria

Desde la Unió de Persones Consumidores, su secretario Vicente Inglada puso el foco en el nivel de ejecución que tenga el gobierno autonómico «más allá de que haya un partido u otro». «Lo que queremos valorar es la gestión diaria, independientemente del partido que esté, y la globalidad de las políticas», indica Inglada que llama a fijarse en medidas que protejan la sanidad y la educación pública.

«¿Cómo es posible que una autonomía con más de 5 millones de habitantes no sea capaz de asumir a 23 menores?», se preguntó el presidente de Cave-Cova, la principal asociación de vecinos, Juan Antonio Caballero.

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