Vox acota la crisis a pactos autonómicos y salva a los ayuntamientos

El partido enmarca la crisis con el PP al ámbito de los «acuerdos regionales» sin que repercuta en los equipos de gobierno locales

Barrera, al teléfono antes del inicio del pleno de las Corts, este miércoles. /

Barrera, al teléfono antes del inicio del pleno de las Corts, este miércoles. / / Germán Caballero

La ruptura de los gobiernos autonómicos no tendrá su réplica en los pactos municipales. Es lo que se ha desprendido de la corta y concisa rueda de prensa de Santiago Abascal para dar cuenta del estado de salud de los gobiernos compartidos con el PP. Los ha dado a todos por vencidos pero no ha hecho referencia a los municipios, pese a que la incertidumbre ha estado patente a lo largo de todo el día en los ayuntamientos valencianos donde la derecha y la ultraderecha gobiernan. 

Así, la orden del líder nacional ha sido clara tras la reunión del comité nacional, reunido esta la tarde y cuya comparecencia se ha retrasado casi dos horas más según el horario previsto. Fuentes de la formación valenciana ya predijeron esta mañana que la ruptura de los pactos se circunscribiría al ámbito autonómico y rebajaban -sin descartarlo por completo- la posibilidad de que las réplicas llegaran a los municipios donde también comparten gobierno.

«Esto está pasando por la decisión de Feijóo de romper los pactos en las comunidades», señalaron desde Vox en la Comunitat Valenciana ayer por la mañana. En todo caso, no se atrevieron a garantizar que la cascada no iba a alcanzar a los ayuntamientos, una teoría que circulaba por algunos grupos del partido ayer por la mañana. «No lo sabemos, esta tarde se aclarará», añadían las fuentes. Cabe recordar que en el partido todo estaba pendiente de lo que Abascal decidiera y, como el propio vicepresidente del Consell, Vicente Barrera, ha señalado esta mañana en las Corts, «haré lo que diga el partido». 

El choque entre Génova y Abascal de estos días no ha generado fricciones, al menos públicas, entre las federaciones valencianas. En el ala popular había tranquilidad frente al órdago, pero esta se ha ido difuminando con los días y ayer ya imperaba la sensación de que habría ruptura, por lo menos, en el Consell. 

Las capitales mantienen el pacto

No será así en los ayuntamientos valencianos. De mayor a menor peso demográfico, València y Castelló, y Alicante puntualmente, mantienen el pacto de gobierno entre PP y Vox un año después de haber rubricado la gobernabilidad en estas tres ciudades. En el caso de València, con Maria José Catalá al frente, firmó con Juan Badenas un pacto en octubre de 2023 que, a tenor de lo sucedido, se mantendrá en vigor aunque no exento de fricciones por el terremoto autonómico.

Junto con las tres capitales de provincia, otras ciudades valencianas pueden respirar un poco más tranquilas. Torrent, Elx, Orihuela, Sant Vicent del Raspeig o Xàbia están gobernados por el PP y Vox y en todos era posible que los populares pudieran seguir el modelo aplicado en el Consell y gobernar en minoría requiriendo, en momentos puntuales, de los apoyos de la ultraderecha. 

Por comarcas, l’Horta es la que más ayuntamientos tiene gobernados con el PP y la ultraderecha. A Torrent, con Amparo Folgado (PP) y Guillermo Alonso del Real (Vox), le siguen otros municipios como Xirivella, gobernado por la popular Paqui Bartual, pero también Albal, Massamagrell, Godella y Rocafort.

En la Ribera son Algemesí y Montserrat los únicos consistorios donde gobiernan estos dos partidos. De hecho, en Montserrat los de Vox accedieron al gobierno a través de una moción de censura, algo parecido a lo que sucedió en Albalat dels Tarongers, en el Camp de Morvedre, donde el único edil de Vox garantiza la mayoría al PP desde enero de este año tras la ruptura del los populares con un partido independiente, la Agrupación de Electores Vecinos de Albalat (AEVA).

Mientras, en el Camp de Túria, también pueden mantener la gobernabilidad municipios como San Antonio de Benagéber, donde se corría un grave riesgo de romper estos pactos locales, en San Antonio de Benagéber se verían gravemente afectados porque Vox está presente con dos concejales que completan otros dos del PP y la alcaldesa, de Ucin. En la Hoya de Buñol, solo Chiva, liderado por Amparo Fort, incluyó a los de extrema derecha en el pacto local.

El único ayuntamiento de Vox

Además de Orxeta, en la provincia de Alicante, es Nàquera el único municipio de la provincia donde Vox sostiene la vara de mando y el PP quien les apoya. Ayer por la mañana, la formación local que lidera Iván Expósito mantenía la cautela sobre lo que estaba por venir. No quisieron manifestarse hasta que su partido decidiera qué hacer por la tarde y no habían recibido ninguna indicación. 

El foco: la acogida de menores

El origen de la ruptura de estos pactos autonómicos poco o nada tiene que ver con la política local y de proximidad. Vox entiende que se ha incumplido el acuerdo de gobierno en materia migratoria, algo que niega el PPCV. En los 50 puntos del pacto firmado hace prácticamente un año, solo hay una referencia al asunto y en ningún momento implica negar la acogida de menores. El punto 48 recoge que la Generalitat, dentro de sus competencias, «pondrá en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de seguridad del Estado los posibles casos de inmigración ilegal», competencias que no se acercan a ninguna que puedan tener los consistorios y que por tanto, quedan fuera de esta ruptura.