Al PSPV le brotan nuevas trincheras

El ‘plácido’ relevo en el liderazgo del PSPV, con Diana Morant asumiendo el mando con el patrocinio de Ferraz tras la década de Ximo Puig, ha logrado apaciguar una transición que muchos esperaban inhóspita. La intervención de Pedro Sánchez evitó el desgaste de una batalla por la secretaría general a la que también aspiraban los dirigentes provinciales de Valencia, Fernandez Bielsa, y Alicante, Alejandro Soler, pero no ha evitado que la tensión y la ruptura se reproduzcan en otros escenarios.

A pocos ha sorprendido la última erupción del volcánico PSPV de Alicante ciudad. La crisis, de hecho, es el estado natural en el socialismo alicantino desde hace lustros. Este último capítulo se ha sustanciado en la petición de dimisión de la exconsellera Ana Barceló, ahora portavoz del PSPV en el Ayuntamiento de Alicante, a Miguel Millana, que es el secretario local en la ciudad. La batalla entre el grupo municipal, liderado por la exconsellera, y la agrupación local, controlada por Ángel Franco, vuelve a abrir en canal al partido en la capital del sur de la Comunitat Valenciana.

El PSOE de Alicante estalla: Ana Barceló exige la dimisión del secretario local

En Castelló, por su parte, los socialistas acaban de cerrar una crisis interna que se prolongaba desde hace meses. La situación estalló el pasado abril, cuando la mayoría de la ejecutiva dimitió para forzar la salida de Germán Renau, exdiputado en el Congreso y hasta entonces secretario general en Castelló ciudad. La guerra interna soterrada desde años atrás, emergía de golpe. Tras un periodo de interinidad con una gestora, el actual diputado en las Corts y expresidente del puerto de Castelló, Rafa Simó, se convierte en símbolo de renovación, y se perfila como canditato a la alcaldía para 2027.

Dimiten 16 miembros de la ejecutiva del PSPV de Castelló para forzar la salida de Germán Renau

Tensión latente en Valencia

En Valencia, por importancia y simbolismo, se concentran en este momento las mayores tensiones que, de momento, se mantienen bajo control. Carlos Fernández Bielsa, secretario general provincial, y aspirante frustrado a al dirección del partido, realizó un reciente movimiento para sacar de su ejecutiva a Vicent Mascarell, secretario de Organización ‘de país’ y número dos de Diana Morant. El episodio se solventó con una renovación parcial, sin los cambios esperados, y todos parecieron dar por cerrado este nuevo episodio.  

Las turbulencias vuelven al PSPV con los cambios en la dirección provincial

Con todo, los rayos latentes son los que provocan los mayores incendios, y la tensión entre Bielsa y Morant parece que no está resuelta. Bielsa ha realizado un fichaje que muchos interpretan como un movimiento orgánico a largo plazo: la incorporación como jefe de gabinete de Francesc Colomer, un activo importante, con experiencia de gestión y visión política, pero también un dirigente con un peso específico a nivel orgánico en el PSPV de la provincia de Castelló, que dirigió en el pasado y donde Bielsa ha tenido poca influencia hasta la fecha.

Disputas habituales

Son tres escenarios de tensión en pocos meses. Las fuentes consultadas, en todo caso, marcan una distancia clara entre el momento actual del partido y las batallas, heridas y cicatrices que se vivieron en el pasado, durante la larga travesía lejos del poder entre 1995 y 2015. De haber desacuerdos por resolver, apuntan, este es el momento, al principio de la legislatura. 

En todo caso, señalan que el PP también tuvo su momento, y no fue breve. En 2017 el PP creó una gestora nada menos que en la provincia de Valencia, tras la bronca pública entre Vicente Betoret y Mari Carmen Contelles. No fue hasta 2020 cuando el partido se estabilizó con la llegada de Vicent Mompó, una operación patrocinada por Génova (Pablo Casado) e integrando a todas las sensibilidades. n

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