Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Perfil

Enrique Crespo: De responsable del control a artífice del saqueo

El ex número dos de la diputación y exalcalde de Manises dirigió la firma que acabó convertida en icono del despilfarro en el imaginario colectivo

Enrique Crespo: De responsable del control a artífice del saqueo

Enrique Crespo, exvicepresidente de la Diputación de València y exalcalde de Manises, vio truncada su carrera política hace ya casi una década. En las elecciones de 1999 logró abrir brecha en el dominio socialista del área metropolitana, lo que le sirvió para subir varios peldaños de golpe en el universo popular. Incluso parecía llamado para más altos vuelos cuando con apenas 27 años sacó su primer escaño de diputado. Pero cuando reeditó la mayoría en 2011, su caída a los infiernos estaba ya a la vuelta de la esquina. Convertido en responsable de Emarsa fue uno de los primeros populares contagiados por el virus de la corrupción. Entonces Emarsa aún era un caso aislado en las filas conservadoras.

Pero el saqueo de la depuradora de Pinedo sirvió para inocular en el imaginario colectivo de los valencianos que el despilfarro y el descontrol del dinero público campaba a sus anchas. Nada fue igual después de que se conocieran los detalles más escabrosos del destino del dinero público entre obsequios, comilonas y acompañamientos de traductoras rumanas.

Por su condición de consejero delegado, Crespo estaba obligado al control, pero acabó siendo artífice del saqueo, una ausencia absoluta de ejemplaridad que impregna toda la sentencia. Fue Crespo quien permitió al gerente, Esteban Cuesta, administrar Emarsa a su antojo y desviar fondos millonarios al enriquecimiento de una trama forjada en amistades personales y afinidades políticas. El corolario a uno de los casos de corrupción más mediáticos llegó ayer. Diez años de cárcel para Crespo.

Compartir el artículo

stats