Unos vándalos robaron ayer por la noche hasta 8 farolas en la pedanía de La Punta. Los delincuentes se llevaron las luminarias tras serrarlas por debajo, a una altura de unos 30 o 40 centímetros de la base. Este robo ha sido denunciado por vecinos de esta zona a Levante-EMV. Los hechos ocurrieron junto al chalet de Doctor Bartual, el inmueble rehabilitado donde se ubica la alcaldía pedánea de este pueblo de València. En concreto, las farolas estaban en la zona comprendida entre el Camino Canal y la calle María Moliner. Actualmente, quedan solo 2 de los 10 puntos de luz que había.
Además de hurtar estas luminarias, los mismos vándalos reventaron el cuadro eléctrico de un centro de Alta Tensión y se llevaron también 3 arquetas del suelo, que una vez levantadas, les sirvieron para cortar y robar los cables del tendido eléctrico. Fuentes del vecindario han descubierto esta mañana estos actos vandálicos.
Además de hurtar estas luminarias, los vecinos denuncian que los mismos vándalos reventaron un centro transformador de Alta Tensión y se llevaron 3 arquetas del suelo, que una vez levantadas, les sirvieron para robar los cables del tendido eléctrico.
También ayer por la noche, los residentes en las casas cercanas sufrieron el ruido y la música de un botellón que arrancó hacia las 22 horas cuando ya se había decretado el toque de queda. Tal como relatan los vecinos, al menos una decena de personas celebraron un botellón en los bancos cercanos al parque de la calle María Moliner. Esta mañana aún había restos de botellas de güisqui y vasos de coca-cola por el suelo. Los ocupantes de al menos 3 coches celebraron su fiesta particular e ilegal al aire libre. Todo ello ha generado una enorme indignación en los vecinos de la zona, que viven en gran parte en los bungalós construidos tras los derribos de la ZAL. Las fuentes consultadas lamentan "el abandono en que sigue La Punta" pues señalan que casi todos los fines de semana, "desde el confinamiento sufrimos el botellón y un ambiente de inseguridad". Además, desde que anochece por la tarde, "da miedo acercarse por allí porque presencia policial tampoco hay", subrayan.
