Brutal ataque de un perro a una niña en casa de una amiga en Castelló

La víctima, de 9 años, recibe decenas puntos en la cara y la boca tras morderle el animal, que no tenía ni chip ni vacunas

La menor se quedó paralizada por el miedo y estar inmóvil pudo salvarle la vida

Imagen de la niña en las que se aprecian las importantes heridas en la cara de la niña. En la foto pequeña, el perro.

Imagen de la niña en las que se aprecian las importantes heridas en la cara de la niña. En la foto pequeña, el perro. / Levante-EMV

Brutal ataque de un perro a una niña en Castelló. Una menor de 9 años ha tenido que recibir numerosos puntos de sutura en la cara y la boca, además de ser intervenida por un cirujano maxilofacial en el Hospital General de Castelló tras morderle el animal de una familia con la que pasaba el fin de semana

Tal como ha podido saber Mediterráneo, diario de Prensa Ibérica, el mismo grupo editorial de Levante-EMV, los hechos sucedieron el domingo de Pascua, aunque no habían trascendido hasta ahora. La menor se había quedado a dormir en casa de una amiga y era la primera vez que pernoctaba fuera de su hogar. Con motivo de un cumpleaños, la pequeña se alojó en una casa de Onda, y todo transcurrió con normalidad hasta el domingo por la mañana.

Durante la celebración de una comida y estando la niña y otros dos menores en el domicilio, jugando con las mascotas en un terreno anexo, se produjo el suceso. De forma sorpresiva y sin que se hubiera dado ninguna acto de provocación o de hostigamiento, uno de los dos perros que había en el domicilio atacó brutalmente a la víctima.

Atacó a la niña en la cara

El animal mordió a la pequeña en varias zonas de la cara –pómulos, nariz y labios, principalmente– y cuando la pequeña abrió la boca para gritar y pedir ayuda también la enganchó, causándole graves lesiones en el interior de la cavidad bucal, con afectación de la mandíbula y de las encías.

La familia propietaria del animal alertó a la madre de la menor de lo ocurrido y se la llevó en su vehículo particupar al Hospital General para que fuera atendida de urgencia por las graves lesiones sufridas. 

La progenitora se personó en el centro hospitalario, muy nerviosa, y se alarmó todavía más cuando vio a la menor, que llegó cubierta de sangre y con la boca muy dañada. Los sanitarios le dijeron a la madre que el hecho de que la niña se hubiera quedado paralizada por el miedo fue «lo mejor» que pudo pasar. 

Sin saberlo, la pequeña evitó que el perro se ensañara más aún, hecho que se produce cuando la víctima intenta zafarse del ataque, por lo que el animal recrudece instintivamente el ataque para dominar a quien en ese momento considera una presa.

Un labrador, sin vacuna y sin chip

El can en cuestión, un labrador, raza que no suele mostrarse agresivo con humanos, carece de chip y vacunas, incumpliendo así la ley. El pasado 29 de septiembre entró en vigor la Ley de Protección de los Derechos y el Bienestar de los Animales, más conocida como ley de bienestar animal. 

Las sanciones por no tener identificados con el correspondiente microchip a perros, gatos, hurones y pájaros se sitúan entre los 10.000 y los 50.000 euros, según la normativa.

El hecho de no vacunar a un animal doméstico se considera una falta grave y puede aparejar sanciones de hasta 2.000 euros.

La niña herida se recupera ya en casa de las lesiones por las que ha sido intervenida quirúrgicamente, aunque se desconocen las secuelas físicas y psicológicas que pueda tener en un futuro tras la importante agresión del animal. 

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