La causa sobre el supuesto saqueo de los fondos públicos de la depuradora de Pinedo, el denominado «caso Emarsa», que puede alcanzar los 40 millones de euros, ya va por los 41 imputados y 102 tomos de diligencias cuando se han cumplido dos años de la presentación de la querella que dio origen a la instrucción. La causa judicial investiga la gestión que entre 2004 y 2010 llevó a cabo la ahora extinta Entidad Metropolitana de Aguas Residuales (Emarsa), empresa pública creada por el Ayuntamiento de Valencia y los municipios de l´Horta para gestionar esa planta y el saneamiento de aguas residuales de Valencia. Las pesquisas periodísticas y judiciales han revelado toda una serie de abusos de políticos, administradores y empresarios, que descapitalizaron la empresa pública que gestionaba la planta de mayor tamaño de la Comunitat Valenciana.

La administración de la depuradora se ha convertido en el paradigma de la mala gestión política y de la falta de control que ha abocado a que acabe en manos privadas. Los excesos con dinero público que les viene relatando Levante-EMV durante estos dos años han hecho sonrojar a la sociedad valenciana. La justicia investiga blanqueos, viajes por todo el mundo, pagos de artículos de lujo, supuestas «traductoras» rumanas y otros asuntos turbios que se resumen en un agujero económico de 17 millones de euros, un posible desfalco de 40 y un colosal núcleo de corrupción. La labor policial y judicial -el juzgado número 15 de Valencia- está siendo ejemplar y ejemplarizante.