La lacra de la violencia y la indefensión del colectivo arbitral sigue muy vivo, también esta temporada recién iniciada. Se han jugado solamente cuatro partidos en la 2.ª Regional pero ya se ha producido la primera agresión a un árbitro. Sucedió este sábado por la tarde tras el encuentro que enfrentó al Alberic Atlètic y al Manuel-l'Ènova del grupo IX, una liga compuesta principalmente por equipos de la comarca ribereña. Según ha podido saber este periódico, tras la finalización del encuentro que acabó con el resultado de victoria visitantes por 0-2 y mientras los dos equipos y el árbitro se disponían a abandonar el terreno de juego del Municipal de Alberic, uno de los jugadores del club local (que había sido sustituido en la primera parte y saltó al terreno de juego vestido de calle) arremetió contra el colegiado, increpándole por su actuación. Al ver la cartulina roja, le propinó primero un puñetazo en la cabeza y después una patada en una de sus piernas.

Varios integrantes de la entidad alberiquense pudieron separar y tranquilizar al jugador y el árbitro se refugió en su vestuario. Según instancias de los agentes de seguridad, ni la Policía Local ni la Guardia Civil hizo acto de presencia en el recinto deportivo y fue el mismo colegiado el que se desplazó después al centro de salud local para ser atendido por los diferentes hematomas aparecidos en su cuerpo tras la agresión. Tenía hinchada la cabeza (entre el ojo y la oreja) y un importante moratón en su pierna. Con el parte médico se dirigió más tarde al cuartel de la Benemérita situado en Alberic para interponer una denuncia por lesiones. El joven colegiado es de la Costera, responde a las iniciales de J. J. T. y es miembro del comité valenciano. "Espero que el jugador no pueda volver a jugar, sancionado como es debido por la federación. El Alberic me dijo que romperán la ficha de ese futbolista porque había dado problemas y no querían que vistiera más su camiseta. La verdad es que te quedas tocado psicológicamente. Vas a un campo de Segunda con la intención de hacerlo bien y seguir subiendo categorías y te pasa esto. Yo ahora he cogido miedo y voy a pedir a la federación que no me dé partidos de Segunda, que quiero pitar a niños durante algunas semanas. No se si voy a continuar o me dejaré el arbitraje. Es muy duro", explicó ayer a Levante-EMV el colegiado agredido, quien añadió: "Los clubes deberían conocer un poco más a los jugadores para evitar estas situaciones. Conocerlos y saber si tienen comportamientos racionales".

Se espera una sanción ejemplar

El colegiado redactó un acta arbitral que después envió al comité de árbitros situado en la delegación de Alberic, ente que se encarga de tramitar la ordenación de los jueces en varias categorías y en las ligas que se desarrollan en la zona del interior del territorio valenciano. Dicho organismo ya remitió ayer la documentación al comité de competición de la federación para que se decida sobre la sanción que se impondrá al jugador del Alberic Atlètic. Según fuentes del mismo comité de árbitros, se espera una sanción durísima y disuasoria que pueda servir de ejemplo para los demás equipos y jugadores de Segunda Regional y superiores categorías.

Ya el año pasado sucedieron altercados de importancia en el grupo X (antiguo de la Ribera) entre jugadores y directivos del Rafelguaraf y el Barxeta, con varios heridos de gravedad. Todavía no hay títulos en juego y los partidos se disputan con la "tranquilidad" de que queda una temporada entera por delante para corregir los errores. Sin embargo, algunos jugadores ya pierden los nervios y recurren a la violencia para escenificar sus frustraciones deportivas.