La investigación policial sobre la presunta agresión de jóvenes antifascistas al dirigente de Nuevas Generaciones del PP en Elda, Mariano Jiménez, ha concluido que todos los indicios apuntan a que los hechos denunciados por el cargo popular son inciertos y que todo fue un montaje, según confirmaron a este diario fuentes próximas al caso. El asunto está en manos del juzgado de Instrucción número 1 de Elda, donde el militante popular ha intentado retirar la denuncia, según confirmaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana.

El juzgado que instruye las diligencias desde principios de mes está a la espera de un informe para tomar una decisión, aunque por el momento hay un joven imputado como presunto agresor. Este último también pretende ejercer acciones legales contra el miembro de NN GG por acusación falsa. Fuentes cercanas al cargo popular indicaron que aún faltan diligencias y que es el juzgado quien debe pronunciarse. El aún imputado fue identificado por Mariano Jiménez como uno de los implicados en la supuesta agresión al grito de «viva la República» y «fascista, facha de mierda».

El día de la falsa agresión Mariano Jiménez y el denunciado se citaron en la Plaza de la Ficia, pero el motivo del encuentro era para dilucidar un asunto sentimental con una chica que también acudió a la cita, igual que otros amigos del joven acusado por el dirigente popular. Todos ellos han comparecido ante la Policía Nacional de Elda y su testimonio no deja duda alguna a los investigadores de que la agresión denunciada no existió.

Por ello, la investigación policial apunta a que las lesiones leves que presentaba el denunciante en el rostro podría habérselas provocado él mismo. Si el juzgado concluye finalmente que todo fue un montaje, como ha revelado la investigación policial, la juez que instruye las diligencias archivará la causa contra el ahora imputado y podría ordenar que se deduzca testimonio contra el dirigente de Nuevas Generaciones por los hechos falsos denunciados.

La denuncia del miembro de la ejecutiva de Nuevas Generaciones del PP motivó un gran revuelo político. El Partido Popular e incluso formaciones de izquierda se solidarizaron con el joven y rechazaron este tipo de agresiones.

Por último, Eduardo Vicente portavoz del grupo municipal socialista en Elda pidió ayer explicaciones a la alcaldesa de la localidad: «no puede esperar ni un minuto más para dar explicaciones por este escándalo».