Cuatro diputados de diferentes grupos parlamentarios -entre ellos el socialista Ximo Puig- exigieron ayer en el Congreso la comparecencia en sesión extraordinaria del ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, para que explique el indulto al conductor kamikaze que mató a un joven de Alzira en 2003 solo diez meses después de entrar en prisión. Pero fueron en balde las peticiones de comparecencia y las acusaciones de "tráfico de influencias" que vertió Ximo Puig, quien volvió a vincular la relación laboral del hijo de Gallardón con el bufete que representaba al kamikaze. El PP, por boca del diputado Leopoldo Barreda, rechazó la solicitud, que calificó de "demagógica" y "carente de todo fundamento", y volvió a defender con más argumentos que nunca la medida de gracia concedida al imprudente automovilista.

La intervención de Puig en la Diputación Permanente del Congreso fue contundente. "Este indulto -lamentó- no lo ha entendido nadie: ha sido un indulto kamikaze, una respuesta kamikaze a una situación grave (...) ¿Por qué este indulto tan rápido y tan irresponsable? La única explicación es que el despacho jurídico del kamikaze es el bufete en el que trabajan familiares directos del ministro y de otros importantes dirigentes del PP. Se quiera o no se quiera, cuando se esconden, la sombra del tráfico de influencias se cierne sobre este asunto de una manera directa", manifestó el diputado y secretario general del PSPV. Tras criticar el tasazo judicial, Puig aseguró que con el nuevo modelo de Justicia "no todos vamos a ser iguales", porque "la vía de solucionar los indultos es tener dinero para ir a un bufete influyente".

Después de escuchar las críticas de diputados de ERC, BNG y Chunta Aragonesista, el parlamentario Leopoldo Barreda justificó el voto en contra a la comparecencia de Gallardón con un argumento: las críticas contra el indulto son una postura "sin fundamento y carente de rigor". Barreda desgranó los motivos para el indulto: el kamikaze está en tratamiento contra la epilepsia, carece de antecedentes, ingresó en la cárcel de forma voluntaria, es un indulto condicionado y ha participado en programas de reinserción.

Por la mañana, el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba dijo que el indulto le parecía "mal" y que el Gobierno debería "dar una explicación". "Creo que es un caso que ha generado una cierta alarma por no decir mucha alarma, sobre todo entre las asociaciones de víctimas de tráfico". El portavoz del PP Alfonso Alonso replicó: "El ministro de Justicia vendrá a la Cámara y podrá dar explicaciones sobre ese asunto y otros que preocupen a la opinión pública o a los grupos", pero ya refiriéndose al periodo ordinario de sesiones que arranca en febrero.

, ha respondido. En su opinión, el Gobierno debería "dar una explicación" no sólo a la familia del afectado, sino a las asociaciones de víctimas --"que colaboran con el Ministerio fantásticamente"-- y al conjunto de los ciudadanos.