Los estudiantes de la Universitat de València que reciban docencia de profesores asociados conocerán las notas aunque no tendrán las actas firmadas. Éste es uno de los "acuerdos revisables" al que llegaron ayer, tras varias reuniones, miembros del equipo rectoral con los portavoces del colectivo que ha iniciado una huelga indefinida justo al final del curso, coincidiendo con la entrega de trabajos y los exámenes.

Dentro de los servicios mínimos que pactaron ambas partes, se decidió que, del 23 de mayo al 15 de junio, los profesores evaluarán a sus estudiantes y les "comunicarán por cualquier medio que estimen oportuno" el resultado final de la evaluación. "En nuestro ánimo está que no se perjudique al alumnado" indicaron fuentes de un asociado del STE-PV.

Estos servicios mínimos son un acuerdo temporal entre ambas partes que será revisable el 8 de junio, pero desde el rectorado -gerente y vicerrectores- no han ofrecido contrapartidas, apuntaron las mismas fuentes.

El profesorado asociado de la Universitat se encuentra en huelga para defender sus contratos temporales ya que la previsión, a falta de la matrícula del nuevo curso es de que, al diminuir el número de grupos por los recortes, se deje de contratar a unos 370 miembros.

Por su parte, alumnos de la Facultat de Ciències de la Activitat Física y l´Esport de la Universitat de València se han encerrado en un aulario de Blasco Ibañez , tras el acuerdo alcanzado en asamblea en apoyo a estos profesores profesionales y el temor a que baje la calidad de la enseñanza.

Mientras, la Conselleria de Educación afirmó ayer que "ningún estudiante universitario se quedará sin beca por cuestión de renta" y anunció que se va a incrementar hasta los 50.000 el número de becados en el próximo curso. Por su parte, representantes del alumnado criticado la reunión por "poco productiva al no querer replantear el aumento de las tasas universitarias", aseguró el Coordinador de l'Assemblea General d'Estudiants, Gabriel Salinas.