Mayor implicación de las familias, trabajo por parte de los niños y más inversiones son necesidades en las que ponen el acento y en las que coinciden los profesores de cuarto de Educación Primaria de colegios públicos consultados por Levante-EMV ante los datos de fracaso escolar que sitúan a los alumnos valencianos de este nivel al final de la cola en España. Los estudiantes de 9 y 10 años de la comunidad suspenden y obtienen las notas más bajas en "Coneixement del Medi", que se imparte siempre en valenciano, y en competencias sociales y ciudadanas.

"Es un problema, en general, hacerles captar la atención y que atiendan, se distraen, así como que ejerciten la memoria. Los niños están muy acostumbrados al ordenador, al juego, al video" afirma la profesora Mari Carmen Baquedano, del colegio Barcia Goyanes de Valencia, quien se queja de "la sobrecarga que arrastran porque son muchos libros y demasiados contenidos". No obstante, asegura: "Mis alumnos van muy bien", afirmación que no le impide reclamar "mayor implicación con los docentes y más cooperación".

¿Soluciones? Mari Carmen Baquedano apunta que "a los alumnos se les tiene que concienciar que estudiar, ir al colegio, es su trabajo. Es estupendo que se lo pasen bien pero, cuando toca trabajar, deben estudiar, hacer las tareas". Además, subraya el absentismo y "la justificación por los padres de faltas injustificables, muchas veces" o la carencia de autoridad.

Enric Sanchis es profesor del colegio Pare Català. En su opinión, los datos del informe demuestran que "algo funciona mal en la educación valenciana" como que "no se gastan correctamente los recursos económicos en una educación de calidad. Se desatienden nuestras peculiaridades culturales, políticas, pedagógicas" apunta. Pero asegura que "lo que se hace en mi clase no tiene qué ver con los resultados de la encuesta".

En pleno recreo, con los niños sin parara de jugar, el maestro Sanchis, sin embargo, considera que los alumnos de su grupo -con un 25% de niños procedentes de la inmigración y el resto, mayoritariamente, de familias con estudios- trabajan bien, casi todos funcionan correctamente. Aquí hemos apostado por una educación encadenada con el entorno. Tenemos un programa de huerta en Benimaclet, trabajamos sobre el terreno, debatimos, dialogamos, se lee en público".

En un aula rodeada de dibujos y el nombre del poeta Miguel Hernández por las paredes, Marisa Boix, profesora de 23 alumnos en el colegio Comunitat Valenciana de Valencia, lamenta que "una de las causas del fracaso escolar es la falta de valoración social hacia la escuela. De algunas. Se debe ir a la armonía entre familias y profesores". Otro motivo podría estar "en un currículum demasiado amplio que no te deja intensificar" y en "la falta de recursos para apoyar a los niños, sobre todo los que se incorporan tarde al sistema educativo, a quienes se les debe dedicar más tiempo. Ahora, hay mucha diversidad dentro del aula" afirma.

En su opinión, el primer caballo de batalla está en las competencias básicas, las materias instrumentales: lenguaje y matemáticas. "Esto es lo más importante y tienen que tenerlo dominado. Compruebo que fallan en comprensión lectora y en cálculo matemático lo que repercute en la resolución de problemas". La profesora Boix estima que en los problemas educativos influyen mucho tanto el medio audiovisual como el poco tiempo que los niños dedican a leer. "La escuela no es sólo las horas de clase. Deben leer, memorizar, buscar información,esforzarse. Yo intento fomentar mucho la lectura".

Del colegio Ballester Fandos, la profesora Vanesa Segura también afirma que "el nivel de nuestros alumnos no representa la media" aunque hace hincapié en que un problema es la falta de inversión y de recursos para atender al alumnado en aulas "con muchos niños inmigrantes y mucha diversidad de nivel".