El Gobierno considera testimonial la venta de drogas junto a los colegios e institutos valencianos tras tres años del plan de control. La policía vigiló durante 2009 casi medio millar de centros educativos de la Comunitat Valenciana y desactivó seis puntos de tráfico de estupefacientes, según recoge una respuesta parlamentaria del Gobierno a la que ha tenido acceso Levante-EMV. El primer año del plan se desactivaron el triple de puntos de venta a pesar de que se vigilaron sólo 170 centros. El control del tráfico de drogas ha tenido su reflejo en el descenso del consumo de cocaína y éxtasis entre los jóvenes, que se ha situado en los niveles más bajos desde 1996, según la "Encuesta estatal sobre el uso de drogas en enseñanzas secundarias".

El Ministerio del Interior activó en enero de 2006 el plan como respuesta a la preocupación de los padres y profesores por la en aquel momento creciente venta de drogas en los institutos. La respuesta policial se ha centrado en la vigilancia y presencia preventiva de patrullas uniformadas y de paisano en los horarios de mayor afluencia de alumnos a los centros escolares. El programa iba a durar inicialmente sólo dos años, pero se ha prorrogado por sus buenos resultados. El Ejecutivo asegura en la respuesta parlamentaria que el tráfico y consumo de drogas en las zonas escolares valencianas se mantiene "en niveles muy bajos".

Ocho traficantes

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado arrestaron en 2009 a ocho traficantes junto a los centros escolares, que controlaban los seis puntos de distribución de droga desarticulados. El Gobierno no difunde el nombre de los institutos y colegios que son objetivo del plan con el fin de no generar percepciones negativas o estimatizaciones innecesarias. La policía se incautó el año pasado de cuatro kilos de hachís y marihuana, 42 pastillas de éxtasis y dosis muy pequeñas (no llegan a un gramo en total) de heroína y cocaína. Los agentes encargados del operativo entrevistaron a 448 directores de centros educativos valencianos.

El plan incluye el control de la venta de droga en zonas de ocio a las que acuden los jóvenes. El Gobierno asegura que el nivel de trapicheo también es muy bajo. El año pasado fueron desactivados 24 puntos de distribución en locales de ocio frente a 56 en 2008. Los agentes integrados en el plan antidroga denunciaron en 2009 a los responsables de 169 locales por permitir la venta de estupefacientes y arrestaron a 172 traficantes.