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El alumnado de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) podrá aprobar un bloque de asignaturas, en su conjunto, aunque no hayan alcanzado la puntuación de cinco en alguna y siempre que la media de todas sea superior a seis, según una norma que el jueves aprobó su Consejo de Gobierno.

La adaptación a la convergencia europea (grados) le va a suponer a estos estudiantes la exigencia de un mayor rendimiento en los estudios y un sistema que se asemeja más al de los colegios, con control de asistencia y evaluación continua.

Las dos normas acordadas: Régimen académico y evaluación del alumnado (que entrará en vigor el próximo año) así como Progreso y permanencia en las nuevas titulaciones oficiales (que en breve se pone en marcha) buscan exigir a sus estudiantes el aprovechamiento de los recursos y exigirles una dedicación acorde con los medios puestos a su disposición, indicaron fuentes oficiales de la UPV.

Los criterios relacionados con la permanencia en los grados son: una exigencia mínima de superación de 12 créditos europeos ECTS en el primer curso de estancia; la necesidad de superar la totalidad del primer curso en dos cursos académicos y mantener un mínimo rendimiento a lo largo del resto de la carrera, aprobando el 50% de los créditos matriculados.

Los alumnos que no acudan a clase de manera reiterada y sin justificación se les podrá anular la matrícula de la asignatura -como adelantó el jueves Levante-EMV-. El vicerrector de Estudios, Miguel Ángel Fernández Prada, explicó ayer que "la idea fundamental es evitar el absentismo estudiantil, que es muy elevado" aunque el profesor tiene la última palabra y habrá excepciones.

La normas de régimen académico contemplan el derecho y el deber de los estudiantes de llevar a cabo un adecuado seguimiento de todas las actividades docentes programadas y presenciales, como elemento fundamental para poder desarrollar e implantar metodologías activas de aprendizaje y sistema de evaluación continuos, lo que obliga a asistir a clase, explican en la Politécnica.

Otra novedad es que se primará la evaluación continua a lo largo del curso, mientras los exámenes finales pasarían a tener una importancia secundaria como herramienta complementaria de evaluación. Se introduce el concepto de "evaluación por currículum", que facilitará la superación agregada de un grupo de asignaturas. Y se establece el contrato programa, para fijar las reglas, que deberán firmar la estructura responsable del grado y los departamentos al inicio del curso, que será a principios de septiembre y concluirá el 31 de julio.