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Pasada la euforia de la celebraciones de los cuarenta años, la Universidad Politécnica de Valencia ha optado por reducir considerablemente varias de sus partidas como cultura (30 por ciento menos), deporte (18%) , protocolo (17%) y rectorado (19%)para no perjudicar otras como las de investigación, docencia y las nóminas, que son intocables.
El Consejo de Gobierno de la Politécnica aprobó ayer un presupuesto de 382 millones de euros para 2010, lo que representa una reducción del 1% respecto a 2009.
Calificados por el vicerrector de Cultura, Joan Peiró, de "restrictivos", "se recortan los gastos de funcionamiento y se mantienen los de tipo social como becas y ayudas, guarderías, cooperación al desarrollo así como las inversiones en infraestructuras" informó. El recorte ponderado es de un 15%.
En cambio, el vicerrector de Planificación, Francisco Mora, señaló que para "no repetir errores", no se han recortado casi los montantes para la política de investigación (un 6% menos) como el programa Innova o la asistencia a congresos, ni en docencia (12%), para equipamiento.
De los presupuestos, el 70% se destina a nóminas, que es un partida fija a la que este año se le incrementa un 2% debido a la antigüedad de la plantilla docente que obliga a pagar más quinquenios.
En algunos casos, los recortes llegan al cincuenta por ciento respecto al año actual.
En investigación y desarrollo también se produce un recorte porque está previsto que vaya a caer de 63 a 60 millones de euros, lo que supone un 4,26% menos de ingresos para las arcas de la Politécnica.
En este campo, los contratos durante el año 2009 crecieron en relación a los que se suscriben con las empresas pero, por el contrario, hubo una caída en lo que respecta a la empresa pública, indicaron los vicerrectores.
