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Problemas visuales como el ojo vago, miopía, hipermetropía o astigmatismo que pasan desapercibidos para padres y docentes están detrás de uno de cada cuatro casos de fracaso escolar en infantil y primaria, según ha dado a conocer el Colegio de Ópticos y Optometristas que ha cifrado en 40.000 el número de niños con un bajo rendimiento académico ocasionado por defectos en la vista que no se diagnostican.

La entidad colegial solicitará a las conselleries de Sanidad y Educación los correspondientes permisos para hacer los controles visuales en los colegios e institutos que lo soliciten.

Fuentes del colegio indicaron que en la sanidad pública no existe la categoría laboral de óptico y que las veces que han sugerido a la conselleria su colaboración para reducir las abultadas listas de espera, la propuesta ha sido denegada.

Para reducir la tasa de fracaso de escolar en la Comunitat, el Colegio de Ópticos-Optometristas que agrupa a 1.800 profesionales en la Comunitat ha solicitado a la Administración valenciana que se implanten las revisiones visuales entre la comunidad escolar, del mismo modo que se realizan los controles bucodentales.

Un 40% de los 400.000 niños que acaban de iniciar el curso tendrán durante los próximos meses dificultades de aprendizaje y escolarización, según las estadística oficiales que apuntan que este año unos 160.000 niños sufrirán fracaso escolar.