Más de un millar de personas, hasta 1.500 según fuentes del Ayuntamiento de Tavernes de la Valldigna, se concentraron ayer durante cerca de una hora a las puertas de la casa consistorial para rechazar el transfuguismo político y la moción de censura que el PP y la concejala Karina Vercher, expulsada de EU, han presentado contra el alcalde, Jordi Juan, de Compromís.

Liderados por una pancarta que rezaba "Per la democràcia, no al transfuguisme", la protesta había sido convocada por el PSPV-PSOE, Compromís y EU. Como estaba previsto el acto también se convirtió en un respaldo al Gobierno local que forman Compromís y PSPV.

Durante la concentración, que discurrió sin ningún tipo de incidentes, se oyeron gritos contra el PP y contra su portavoz, Manolo Vidal, así como a favor del Gobierno local. Al margen de la pancarta que presidió la protesta, una de las asistentes advertía al líder del PP: "Cuidado Manolo que Karina no es de fiar".

Entre los participantes destacó la presencia del alcalde y el Gobierno local al completo, así como alcaldes, concejales y dirigentes de las tres fuerzas políticas que habían convocado la concentración. Entre ellos, el diputado de Compromís y exalcalde de Sueca, Joan Baldoví, y el exalcalde de Gandia y secretario de Política Municipal del PSPV, José Manuel Orengo. Pese a la presencia de estas personas, los partidos convocantes quisieron que el protagonismo de la lectura del manifiesto final recayera en EU, formación en la que militó la concejala tránsfuga que ha apoyado la moción de censura.

Merce Pérez, coordinadora de EU en Tavernes, recalcó que Karina Vercher "no es de EU", que "es una tránsfuga" y que este partido rechaza la moción de censura. "Nos ha robado los votos para aliarse con la derecha", indicó Pérez.