La Policía Local de Quart de Poblet tiene los kilómetros contados. Literalmente. Y es que una orden interna limita las distancias que deben recorrer los vehículos patrulla en cada turno: 30 kilómetros los coches y 25 las motocicletas. En caso de que se sobrepasen estas cifras -algo al parecer bastante habitual-, los agentes deben justificar siempre el exceso.

Fuentes municipales señalaron ayer que no se trata de una prohibición, sino de "una recomendación" que forma parte del futuro Plan de Policía de Proximidad. El objetivo, detallan, es que las patrullas "se desplacen a los diferentes puntos del municipio y, en lugar de hacer las rondas en coche o en moto, aparquen y vayan a pie, entablando una relación más directa con la ciudadanía. Es decir, haciendo más labor de policía de proximidad". Sin embargo, en la orden interna nada se dice de esta intención de acercarse a los vecinos. Únicamente se mencionan el ahorro energético y el cumplimiento del contrato de "renting" -a más kilómetros de los acordados, más tendrá que pagar el consistorio- a la hora de justificar las nuevas limitaciones del kilometraje policial.

En concreto, la circular emitida por el jefe de la Policía Local de Quart de Poblet y dirigida a toda la plantilla de agentes dice: "Dado el incremento desmesurado de kilómetros detectado en los vehículos patrulla y en aras al ahorro energético, así como por el cumplimiento del contrato de 'renting' los kilómetros a realizar por turno no excederán de 30 km los coches y de 25 las motocicletas. El exceso en cualquier caso deberá ser justificado".