Los padres de alumnos del colegio de infantil y primaria Emilio Lluch de Nàquera, han denunciado que sus hijos están recibiendo clases ya no sólo en aulas prefabricadas, sino también en los corredores que separan los distintos barracones, sin apenas luz y prácticamente a la intemperie. Concretamente, los alumnos afectados por esta situación son los de educación alternativa a la religión.

No es el único extremo preocupante para los 380 niños de este centro escolar; sólo la mitad de los cuales reciben sus clases en aulas de obra, construidas en 1975. Por ejemplo, la aglomeración de chiquillos durante la hora del recreo es tal que la dirección del colegio les ha prohibido jugar con balones de cuero por el peligro de golpear con él a otros compañeros que no estén jugando. A esto, añaden los padres, contribuye también que el patio no sea un espacio precisamente grande.

Los padres de alumnos siguen enumerando los problemas de sus hijos por el estado del colegio, como son la inexistencia de aulas para dar música o religión, o la necesidad de compartir en una misma aula especialidades diferentes, además de los excesos en el ratio de alumnos por aula, que en algunos casos dobla el máximo establecido por la ley.

Ante esta situación, y el silencio de la conselleria de Educación ante las reclamaciones de los padres, la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) ya ha anunciado su intención de iniciar una serie de movilizaciones de protesta, la primera de las cuales está prevista para el próximo 24 de octubre. Y, además, cuentan con el apoyo del ayuntamiento, gobernado por el PP.

Según ha explicado el propio alcalde, Ricardo Arnal, hace ya tres años que se proyectó la ampliación del CP Emilio Lluch (el únio de infantil y primaria público de Nàquera) "y el consistorio ya ha cumplido con su parte. Ya ha puesto los terrenos a disposición de la Generalitat y eliminado cualquier servidumbre que afectase a la construcción. Estoy seguro que Educación ya ha redactad0 el proyecto y tramitado todos los permisos. Pero falta lo más importante que es empezar las obras. Ya debería estar en marcha".

En la última reunión que mantuvo el AMPA con el ayuntamiento, la concejal de Educación reconoció que no había aún una fecha concreta para el traslado de los alumnos y el comienzo de las obras de ampliación. Y añadió que la consellería de Educación "afirma que antes de que acabe el curso se empezará pero no precisa en qué momento; si que se hará el traslado durante un periodo festivo lo suficientemente amplio para llevarlo acabo". Los padres advierten que el Consell tiene que actuar con rapidez ya que la situación no puede más que empeorar. "Cada vez hay más niños en Nàquera. Este curso han salido 27 del colegio y han entrado 70. O hacen algo o esto será un desastre".

El Síndic pide mejorar la seguridad del autobús en Requena

El síndic de Greuges, José Cholbi, ha solicitado a la Conselleria de Educación que adopte "cuantas medidas sean necesarias" para garantizar la seguridad de los alumnos de una aldea de Requena que cada día realizan, sin cinturón de seguridad y por autovía, un viaje en autobús de una hora y media, cuando en condiciones normales tardarían entre 20 y 30 minutos.

La recomendación del síndic se produce a raíz de la queja interpuesta por el colectivo de padres y madres de alumnos del CEIP Lucio Gil Fagoaga de Requena, residentes en la aldea de La Portera, quienes presentaron un escrito de reclamación en en el que aseguraban que sus hijos "se juegan la vida durante aproximadamente una hora y media diaria cinco días a la semana}.

Se da la circunstancia de que la aldea de La Portera dista tan sólo 10 kilómetros de Requena, por lo que en condicione normales, el trayecto se completa en unos 10 o 15 minutos, pero los niños tardan entre 40 o 50 minutos de ida y otros tantos de vuelta en el autobús por una autovía "de intenso tráfico rodado".

Por esta razón, los padres proponen que se cambie el sentido de la ruta, es decir, que sus hijos suban los últimos al autobús y bajen los primeros, para evitar el paso por la autovía, como solución provisional hasta que se incorporen los cinturones de seguridad a la ruta escolar.

Tras estudiar el caso, el síndic de Greuges recomienda a Educación que "arbitre cuantas medidas sean necesarias para garantizar en todo caso la seguridad de estos alumnos". Asimismo, agrega que "para asegurar la reducción del tiempo en el autobús escolar, valore la conveniencia de modificar la actual ruta a fin de evitar el trayecto por la autovía y/o la instalación de cinturones de seguridad en los vehículos".