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La Sindicatura de Greuges de la Comunitat Valenciana ha dado un toque de atención a la gestión del conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, y ha abierto una queja de oficio para investigar las causas de la "elevada" deuda que mantiene la conselleria con los comedores escolares, según informaron ayer fuentes de la institución. El síndic, José Cholbi, ha tomado esta decisión a petición propia tras las informaciones publicadas por los medios de comunicación sobre unos impagos que avanzó Levante de Castelló, admitieron las mismas fuentes.

La Generalitat, de hecho, mantiene a estas alturas sin pagar el gasto de comedor del primer trimestre de curso a los colegios de la Comunitat, entre otros a los 160 de Castelló, tal como admitió este lunes en Orihuela el conseller. A este respecto, Cholbi acaba de remitir una carta al titular de la conselleria para que le traslade toda la información relativa a estay deuda y las circunstancias causantes, así como la disposición del Consell para abonar el pago correspondiente al primer trimestre del año a los colegios que no han recibido "los 22 millones de euros que debían haberse abonado en el mes de diciembre del pasado año".La Conselleria de Educación debe a los colegios 14 millones en concepto de gastos de funcionamiento de los comedores escolares, más otros 8 millones en becas de comedor.

El síndic recuerda a Font de Mora que los servicios complementarios de transporte y comedores escolares tienen una "enorme trascendencia" y constituyen un "factor esencial" que permite que los menores asistan a los centros, "más allá de las concretas disponibilidades horarias de los padres".

Font de Mora insistió el lunes en que el pago del último trimestre de 2009 será inminente. Lo mismo dijeron desde la conselleria hace tres semanas. Entonces señalaron además que la orden de pago se realizó en diciembre pero que no se había materializado por problemas burocráticos por parte de la Conselleria de de Hacienda. Y la situación de los centros educativos es cada vez más insostenible. Ya hay proveedores que no pueden pagar a los monitores.