Entrevista | Agustín Pérez Rubio Comisario de España en la Bienal de Venecia 2024

"España tiene mucho que avanzar en restituir arte colonial expoliado"

El experto en arte y gestor museístico aboga por la devolución de tesoros o al menos porque se haga entender a quién pertenecen

Agustín Pérez Rubio.

Agustín Pérez Rubio. / Levante-EMV

Francesc Arabí

Francesc Arabí

Este valenciano de Torrent tiene espíritu nómada. Fue conservador jefe y luego director del Musac (Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León), cargo del que dimitió en 2012 por los recortes que hubo en Cultura. Emigró a Nueva York y se instaló como independiente. De ahí dio el salto a Toronto, para acabar dirigiento el Museo de Arte Latinoamericano (Malba) de Buenos Aires. En 2018 estuvo en la Bienal de Berlín, y luego, en Venecia, representando a Chile, con la artista Voluspa Jarpa. Tras la pandemia se instaló en Madrid y desde ahí trabaja internacionalmente.

Licenciado en Geografía e Historia en 1995, pero siempre se ha dedicado al arte.

Hice Geografía e Historia con la idea de cursar Historia del Arte. Me fui a hacer cursos de doctorado con Román de la Calle y Teresa Beguiristain, sobre estética y filosofía. Me apetecía llegar a entender por qué las obras son arte o por qué no. Trascender la parte histórica, que me gusta, para abordar las cuestiones que tienen que ver con la parte antropológica, social y filosófica de entender los procesos del arte. Y estudiar la filosofía del arte, que es la estética.

No pase por València que ahora se están generando vacantes y hay poca cantera en VOX para dirigir museos.

Estoy como independiente. Si me quieren así yo voy y les hago un proyecto. Aunque desde que me fui, me llaman muy poco, se ve que nadie es profeta en su tierra. Hoy precisamente he dado una conferencia de hora y media en la Universitat Politècnica.

Haber trabajado tanto con la artista hispanoperuana Sandra Gamarra y con una mirada crítica del colonialismo español, habrá generado armonía. ¿Ha pesado a la hora de ser elegidos por el jurado con el proyecto ‘Pinacoteca migrante’?

Creo que es muy importante la manera en la que se relacionan comisario y artista. Venecia es la única bienal organizada por países. Por primera vez una artista que no ha nacido en España se presenta y representa a nuestro país. Aunque Sandra lleva media vida en Madrid, tiene un hijo nacido aquí...Mi relación con ella empieza cuando llegó a Madrid con una beca. Y la seleccioné como una de las artistas para la Bienal de Berlín. Es pintora, pero Sandra es mucho más que una pintora.

¿Cómo surge el proyecto?

La invitaron a presentar proyecto para Venecia y ella me eligió a mi. Como dupla hemos funcionado muy bien incluso en momentos de tensión política. En tiempo récord, mes y medio, presentamos una propuesta de 170 páginas. De las cinco que optaron salió la nuestra por unanimidad del jurado. Me siento cómodo. No voy a Venecia llevando a Sandra, sino que una mujer, peruana, española, latinoamericana y mestiza me lleva a mí a representar a mi país a través de la pintura...

El proyecto casa bastante con el tema de la bienal.

Parece hecho adrede, pero no es así. Nuestro concurso fue en enero-febrero y el comisario general de toda la bienal, el brasileño Adriano Pedrosa, dijo cuál era el tema de la bienal en junio. Adriano es amigo y ha trabajado mucho con Sandra... Se siente muy identificado con nuestra propuesta. La de la bienal, «Extranjeros en todas partes», encarna una idea de diáspora y migración que está muy presente en nuestro proyecto.

¿La mirada eurocéntrica y acrítica con el colonialismo está más extirpada del arte que de la política?

Como dice Walter Mignolo hay dos sitios de revolución: la universidad y el museo. La universidad no deja de ser algo académico y el museo implica colonialidad, se fundamenta en el siglo XIX con los tesoros. Tenemos la obligación de renombrar y estudiar estos procesos desdelos museos. Y en esa relectura tenemos que ser críticos con nosotros mismos. En el mundo del arte y la cultura estos temas siempre van de avanzadilla. En España nos queda mucho que avanzar en estos temas de relectura del colonialismo y restitución del arte expoliado. En Francia, Macron, ha devuelto parte de los bronces de Benín a museos africanos. En Alemania están en una restitución de parte del legado del expolio colonial. No abogamos por que los museos se queden vacíos, simplemente por investigar y entender que la restitución es posible. Muchas veces no es la devolución, sino entender a quién le pertenece. Lo que no puede ser es que el tesoro Quimbaya de Colombia esté en el Museo de América, cuando el gobierno colombiano ha pedido bajo ley internacional al gobierno de España que se devuelva. Y se hace oídos sordos. O que salga a subasta el Códice de Trujillo, que el Museo de Arte de Lima (Mali) haga una peticion y ponga dinero sobre la mesa para quedárselo y el gobierno de España decida finalmente que no.

¿Cómo valora la salud museística valenciana?

El IVAM está muy bien. Es un lujo poder visitar la exposición de Otobong Nkanga o la que hicieron de Anny y Josef Albers. La colección del IVAM es increíble. Muchos vienen al IVAM, va al San Pío, a la Universitat, al Centre del Carme, al ETNO... Y ahora hay otras propuestas, que no he visto aún, como el Centro Hortensia Herrero (CHH). La ciudad ha estado en un momento cultural álgido. Lo público y lo privado han de complementarse.

Una bienal con denominación de origen València: Inelcom pone la luz

Una bienal con denominación de origen València: Inelcom pone la luz 

La participación española en la Bienal de Venecia, que arranca el 20 de abril de 2024, tiene pedigrí valenciano. Además del comisario, Agustín Pérez Rubio, habrá más representación valenciana. El catálogo lleva el sello del diseñador de Torrent Eugenio Simó y una de las dos coordinadoras del pabellón también es de la Comunitat Valenciana. 

Como es habitual, la financiación del pabellón es 100% pública. Pero, como el contenedor carece de iluminación, el comisario y la artista Sandra Gamarra han buscado patrocinador privado. Y no será una empresa cualquiera. Será la firma de origen setabense Inelcom la que financiará e iluminará el proyecto. El presidente de la empresa, Vicente Quilis, y su hijo, Javier Quilis, son dos enamorados del arte. Hasta el punto de que Inelcom posee una de las mejores colecciones de arte privado, con 255 obras de 82 artistas. Se exponen en el centro que la firma tiene en Pozuelo de Alarcón. Les asesora el ex director de la Tate Modern Vicent Todolí, otro ilustre valenciano.